La Navidad está este año marcada por los contrastes para la Familia Real de Suecia. Por un lado, la tristeza del recuerdo de la princesa Brigitta, hermana del rey Carlos Gustavo a la que esta misma semana han enterrado en la más estricta intimidad; por otro, el 81 cumpleaños de la reina Silvia, que es el 23 de diciembre, y la emoción por el próximo nacimiento del cuarto hijo de los príncipes Carlos Felipe y Sofía. Las fiestas, aunque agridulces, han arrancado oficialmente para los Bernadotte, que han continuado con la "bonita y larga tradición" de recibir los abetos que decorarán los salones reales en estas fechas. Una jornada protagonizada por la esposa del monarca y sus ocho nietos en la que todas las miradas se han posado en el príncipe Alexander y su percance.
El primogénito de los duques de Värmland se ha mostrado entusiasmado al ver los árboles de tamaño XL que han llevado los alumnos de la Universidad de Agricultura de Umeå. Ha dejado ver su parte más divertida colocando los adornos mientras jugaba y bromeaba con sus hermanos pequeños y sus primos, los dos hijos de la princesa Victoria y los tres de Magdalena de Suecia. Pero aunque ha estado imparable durante toda la jornada, llegar no ha sido para él tarea fácil y ha tenido que ser ayudado por la reina Silvia y la princesa Estelle. Colocadas una a cada lado, ambas le han ayudado a acceder al gran salón en el que han preparado todo, ya que apenas podía caminar.
Alexander de Suecia tiene un esguince en la pierna y por eso ha necesitado apoyarse en su abuela y su prima mayor para no forzar y caminar con seguridad, sin hacerse daño. A la princesa Estelle la agarraba por la cintura mientras que a la Reina le ha dado la mano, entrelazando sus dedos. Han entrado los últimos, por detrás de los más pequeños de los Bernadotte, y sin dejar de sonreír. La jefa de comunicación de la Casa Real, Margareta Thorgren, ha confirmado que el niño "se ha torcido el pie" y ha dejado claro que se trata de un percance leve. No le impide, por tanto, seguir adelante con sus obligaciones y acompañar a la familia en los preparativos de las navidades, que llegan tras un 2024 de cambios.
Un 2024 de cambios
Este año, Magdalena de Suecia, Chris O´Neill y sus tres hijos, Leonore, Nicolas y Adrienne se han instalado en Suecia tras una década residiendo en el extranjero. De esta forma, la Princesa está más presente en la vida institucional y los niños acuden a un colegio nórdico, al igual que sus primos. El otro gran hito que ha marcado los últimos doce meses para los Bernadotte ha sido el embarazo de la princesa Sofía, que dará a luz en febrero y aún se desconoce si será niño o niña. "Tanto mi marido como yo venimos de una familia de cinco, así que pensamos que sería un buen número y nos sentimos bastante felices con él. Pero, afortunadamente, hay más en camino. Nos sentimos muy agradecidos. Quizá no estaba planeado, pero ahora estamos muy, muy emocionados. Especialmente los niños", contaba ella en un reportaje de Vogue con motivo de su 40 cumpleaños.