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La gran ceremonia de los Premios Nobel 2023 se ha celebrado este domingo en Estocolmo con la presencia, como manda la tradición, de la Familia Real sueca. Luciendo sus mejores galas, los reyes Carlos Gustavo y Silvia, junto a los príncipes Victoria y Daniel, ocupaban sus asientos en esta jornada de tanta pompa y esplendor
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Carlos Felipe y Sofía de Suecia, durante la entrega de los galardones más prestigisos del mundo que tenía lugar en el Concert Hall de la capital nórdica. Quien no ha acudido nuevamente es la princesa Magdalena, que vive con su marido y sus hijos EE.UU., convirtiéndose así un año más en la gran ausente de esta cita tan importante
Panorámica del histórico y hoy abarrotado recinto que acogía la gala de los Nobel. Este edificio azul, situado en la céntrica plaza de Hötorget, se inauguró en 1926 y fue diseñado por el arquitecto Ivar Tengbom. Es, además, la sede de la Real Orquesta Filarmónica de Estocolmo
El nuevo retrato de la Familia Real sueca (con un curioso detalle) que anuncia una gran celebración
Victoria de Suecia lucía impresionante con su vestido y su tiara mientras seguía muy atenta todos los detalles del acto. La heredera al trono, que parecía sacada de un cuento de hadas, deslumbraba con este diseño de manga asimétrica, cuerpo bañado de pliegues y gran aplique floral sobre el hombro
Así vive la Familia Real sueca estas Navidades: de los reencuentros al invitado más esperado
La Sala de Conciertos de Estocolmo era el majestuoso escenario de estos premios que reconocen la excelencia y el trabajo en distintos ámbitos. A continuación, se celebraría el banquete posterior en el Ayuntamiento de la ciudad con todos los asistentes
La francesa Anne L'Huillier recogía de manos del monarca el Nobel de Física por la creación, junto a Pierre Agostini y Ferenc Krausz, de herramientas para estudiar el desplazamiento ultrarrápido de los electrones dentro de átomos y moléculas
Imagen durante la gala del busto esculpido de Alfred Nobel (1833-1896), el químico, ingeniero, inventor y filántropo que da nombre a los reconocimientos. El industrial sueco dejó un gran legado para la humanidad que hoy en día se sigue recordando
Silvia de Suecia, que también llevaba su preciosa tiara, estaba sentada al lado de su marido y delante de su hija mayor y su yerno. Entre otras distinciones, veía cómo le daban el Nobel de Economía a Claudia Goldin por sus estudios sobre la evolución del rol de las mujeres en el mercado laboral
La Familia Real sueca luce las condecoraciones otorgadas por Felipe VI en su viaje de Estado
La princesa Sofía es un verdadero icono de estilo y belleza, como atestiguan las imágenes de este día. Apostaba por un largo traje de cuello redondeado, hombreras delicadamente pronunciadas y cintura ceñida, de la que nacía una falda de tul que rozaba el suelo ocultando su calzado
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Veíamos a los flamantes ganadores en el momento que entraban al auditorio, entre ellos el dramaturgo noruego Jon Fosse, quien recibía el Nobel de Literatura por sus obras innovadoras. A cada premiado se le hacía entrega de un diploma personal, una medalla y dinero en efectivo que asciende a 11 millones de coronas suecas (947.000 euros)
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El rey Carlos Gustavo entregaba los premios, en esta ocasión al físico húngaro Ferenc Krausz. También eran galardonados los bioquímicos Katalin Karikó y Drew Weissman con el Nobel de Medicina, por el desarrollo de la tecnología de ARN que abrió el camino para las vacunas contra el covid-19 de Pfizer/BioNTech y Moderna
Antes de todo ello, cambiando de país a la vecina Noruega y desde la una de la tarde de este mismo domingo, el imponente Ayuntamiento de Oslo era el escenario de la entrega del Nobel de la Paz como se ha hecho en ediciones anteriores
Entre aplausos por parte de los presentes, la Familia Real nórdica hacía acto de presencia para encabezar esta primera parte de una día memorable. Fecha sin duda marcada a fuego en el calendario, donde los focos de medio mundo estaban puestos en lo que allí acontecía
Haakon y Mette-Marit de Noruega, vestidos sobrios y elegantes, antes de ocupar su asiento una vez la Princesa de 50 años parece haber dejado completamente atrás los problemas de salud que el pasado octubre le apartaron durante un mes de su agenda institucional
Haakon de Noruega acude al izado de la bandera arcoíris en Oslo
El rey Harald caminaba apoyado en sus muletas, que le acompañan siempre en todos sus actos públicos desde hace ya tiempo. A sus 86 años (cumplirá 87 en febrero), el jefe del Estado sigue al pie del cañón pese a que su móvilidad no es la más favorable
El rey Harald de Noruega se toma con sentido del humor su caída ante la reina Margarita de Dinamarca
La Familia Real noruega, desde sus respectivos asientos, aplaudía durante uno de los discuros que se han escuchado en la gala. "El Nobel de la Paz de este año reconoce a todas las mujeres valientes de Irán", dijo la presidenta del comité del Nobel de este país, Berit Reiss-Andersen
Mette-Marit de Noruega lo da todo animando a su marido y sus hijos en un partido de fútbol
La Princesa, aquí esbozando una leve sonrisa, apostaba para la ocasión por un estilismo 'total black' incluida la diadema. Como su marido y sus suegros, era testigo de una cita marcada también inevitablemente por los actuales conflictos bélicos de Ucrania y Oriente Próximo
Mette-Marit de Noruega utiliza el truco de la princesa de Gales para rejuvenecer su traje sastre
La reina Sonia, al lado de su esposo Harald de Noruega, estaba muy atenta a la ceremonia mientras se pronunciaban palabras de gran calado. Intervenciones que defendían la lucha por los derechos humanos y poner fin a la discriminación de las mujeres en países como Irán
Haakon de Noruega demuestra que sigue tan enamorado de Mette-Marit como el primer día
La cantante y compositora noruega Ane Brun actuaba una vez más sobre el escenario con su guitarra, como ha hecho en ediciones pasadas de los Nobel. La voz profunda y las dulces melodías de esta artista de 47 años le han valido no pocos elogios a lo largo de su carrera
Haakon y Mette- Marit de Noruega celebran su 20º aniversario de boda con dos meses de retraso
Espectacular panorámica del City Hall de Oslo durante la gala que tenía una ausencia notable: la de la activista iraní Narges Mohammadi, ganadora del Nobel de la Paz, que está encarcelada en su país y ha estado representada por sus hijos en la ceremonia
El tierno gesto de Mette-Marit de Noruega y su hija Ingrid Alexandra en su felicitación navideña