La vida de Carlos Felipe de Suecia (44) va mucho más allá de los compromisos institucionales a los que acude como hijo de los reyes Carlos Gustavo y Silvia. El príncipe forma parte desde 2012 de Bernadotte& Kylberg, agencia de diseño en la que tiene como socio a Oscar Kylbergse (51) y cuyo objetivo es "hacer del mundo un lugar mejor y más bello". Mediante esta empresa han emprendido un "nuevo y apasionante viaje" en el mundo de la moda. Como parte de la firma han lanzado hace dos semanas una colección textil marcada por el estilo de vida nórdico, marcada en la practicidad, y con el objetivo de que las prendas pasen de generación en generación.
La propuesta incluye pañuelos de seda de colores que cuestan unos 335 euros, bufandas de lana que tienen un precio de 280 euros y mantas de 696 euros. Todas las prendas tienen como print las iniciales B&K, correspondientes a los apellidos de los creadores. Estaba previsto que los artículos saliesen a la venta el año pasado, coincidiendo con el décimo aniversario de la firma, pero apostaron por no precipitarse y dejar que el tiempo siguiese su curso, sin forzar los procesos de creación, tal y como hacen desde el inicio.
Los primeros productos que lanzaron a la venta hace once años fueron unos cuencos de gres color aptos para horno que tenían versiones para toda la familia: desde estilos sobrios para los adultos a diseños con cabezas y patas de animales para los pequeños de la casa. Desde entonces han creado copas de vino, cubertería, vajillas, gafas de sol, abrigos de plumas, protavelas... Algunas de estas craeciones nacen fruto de colaboraciones con firmas muy prestigiosas en Escandinavia como Georg Jensen, Stelton, Zwiesel, Hästens y crearon una suite para el IceHotel de Laponia.
Forman un buen equipo y conectaron a la perfección desde que un amigo en común los presentó y se dieron cuenta de que tienen muchas cosas en común. Más allá de sus intereses y de una visión de negocio muy parecida, ambos han sido alumnos de Forsberg´s, una prestigiosa escuela de Estocolmo para formarse en diseño gráfico y publicidad. El duque de Värmland y Oscar se toman "muy en serio nuestra misión, pero no a nosotros mismos", tal y como apuntan en Elle. Cabe recordar que le hermano de la heredera al trono sueco tiene un profundo interés por el arte, el diseño y el diseño industrial y forma parte de la junta directiva de los Amigos del Museo Nacional.
Para formar un equipo que funciona bien durante tanto tiempo, consideran que es importante tener cada uno su espacio personal, libertad de creación, respetar las opiniones y llegar siempre a un entendimiento mediante el diálogo, evitando el conflicto. Además, como empresarios, tienen una máxima: sentir que el consumidor hubiese creado ese mismo artículo que ellos proponen si hubiera tenido la oportunidad. También se implican personalmente en los procesos y, en esta última colección, han estado hablando con artesanos de Portugal para saber cómo trabajan las diferentes telas.
La conciliación como prioridad
Por encima de las ideas a las que dan forma, para el hijo del monarca y su socio lo más importante es la conciliación y la tener tiempo de calidad para dedicarle a la familia. Desde que fundaron la empresa, Carlos Felipe de Suecia ha tenido junto a la princesa Sofia a Alexander (2016), Gabriel (2017) y Julian (2021); mientras que Oscar Kylberg, padrino del hijo mediano del Príncipe, tiene un niño de diez años. Ambos quieren formar parte del día a día de sus niños, estar en rutinas cotidianas como acompañarlos al colegio y los hacen partícipes llevándolos al estudio o teniendo reuniones online con los niños en brazos.