Fue el pasado sábado cuando el príncipe Julian, que nació el 26 de marzo de 2021, fue bautizado en Estocolmo. El tercer hijo del príncipe Carlos Felipe y Sofía de Suecia, octavo nieto de los reyes Carlos Gustavo y Silvia, recibió el sacramento en la capilla del Palacio de Drottningholm, en la isla de Lovön. Tres días de esta gran cita familiar de los Bernadotte, la Casa Real sueca ha distribuido tres fotografías oficiales del bautizo del nuevo miembro de la familia.
- Victoria de Suecia, la princesa Magdalena y otros looks de invitada en el bautizo de Julian
Las instantáneas, realizadas por Elisabeth Toll, fueron tomadas en uno de los salones de Palacio, el mismo en el que posaron la princesa Magdalena y Chris O’Neill tras el bautizo de su tercera hija, la princesa Adrienne. En la primera foto vemos a los orgullosos papás sentados con sus tres hijos, el recién nacido y los dos mayores, Alexander y Gabriel de Suecia, de 5 y 3 años respectivamente. Detrás de ellos aparecen los cinco padrinos del pequeño Julian: Johan Andersson, miembro de una de las grandes fortunas del país, y su esposa, Stina Andersson, cuya marca de zapatos suele lucir la princesa Sofia; el empresario Jacob Högfeldt, amigo de la escuela del príncipe Carlos Felipe; Patrick Sommerlath, primo del príncipe, y Frida Vesterberg, amiga de Sofia Hellqvist.
En la segunda imagen también aparecen el príncipe Carlos Felipe y Sofía de Suecia con sus tres hijos y sus respectivos padres, los reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia y el matrimonio formado por Erik y Marie Hellqvist.
- La emoción de la Familia Real sueca en el bautizo del príncipe Julian
La tercera y última imagen es un retrato de Carlos Felipe y Sofía de Suecia con sus tres hijos. Seis años después de su romántica boda en la capilla del Palacio Real de Estocolmo, los principes han formado una bonita familia. En 2016, a los diez meses de darse el 'sí quiero', dieron la bienvenida a su primogénito, Alexander; en 2017 a su segundo hijo, Gabriel, y el pasado 26 de marzo vino al mundo el pequeño Julian.
Las restricciones sanitarias obligaron a reducir el número de invitados a ochenta personas y a cancelar la recepción por un almuerzo privado. Sin embargo, no alteraron los ritos de la ceremonia: el príncipe Julian llevó el faldón de cristianar de la familia Bernardotte; sobre su cabeza se derramó agua de una fuente de la isla sueca de Öland y una vez bautizado su abuelo, el rey Carlos Gustavo, le impuso la Real Orden de los Serafines, una distinción para miembros de la realeza sueca y jefes de Estado extranjeros. Eso sí, la televisión pública no se hizo eco de la celebración. ¿El motivo? Acatar la decisión del rey Carlos Gustavo después de retirar los derechos y deberes reales de los hijos de Carlos Felipe y la princesa Magdalena.
El bautizo del principe Julian propició la esperada reaparición ante la prensa de Magdalena de Suecia. La Princesa ha regresado a su país natal tras más de un año y medio sin poder viajar debido a la pandemia. Actualmente, Magdalena de Suecia reside en Miami junto a su marido, el empresario Chris O’Neill, y sus tres hijos, Leonore, Nicolas y Adrienne, y ahora disfruta de sus vacaciones en el país escandinavo, donde aterrizó hace más de un mes.