Segundo comunicado de la Casa Real sueca en pocas horas. Si este jueves por la mañana daba a conocer que el príncipe Carlos Felipe y su mujer, Sofia, habían dado positivo en COVID-19, ahora desde palacio se ha emitido un nuevo mensaje institucional en el que han querido informar acerca del estado de salud del resto de miembros de la Familia Real sueca, teniendo en cuenta que hace solo unos días todos ellos estuvieron en contacto durante un funeral privado.
Así, los reyes Carlos Gustavo y Silvia, su hija Victoria y el marido de esta, Daniel, están libres de coronavirus. Los cuatro se sometieron al pertinente test y lo hicieron por segunda vez en menos de una semana, dado que el pasado viernes, día del sepelio, se realizaron las pruebas poco antes de acudir al acto privado. En aquel momento, el resultado fue, en todos los casos, negativo. Sin embargo, este miércoles Carlos Felipe y Sofía de Suecia presentaron síntomas compatibles con la infección.
Tras diagnosticarles el contagio y comprobar que se encuentran "bien dadas las circunstancias", aunque confinados en su vivienda junto a sus dos hijos, Alexander -de cuatro años- y Gabriel -de tres- para cumplir así con la correspondiente cuarentena, tocaba comprobar la situación de los demás royals suecos. Los príncipes Carlos Felipe y Sofía se han aislado al igual que ha hecho el rey Felipe VI, quien estuvo el pasado domingo con un contacto que dio positivo y, por tanto, ha tenido que seguir con el protocolo que establecen las autoridades sanitarias y permanecer en cuarentena.
También los reyes Harald y Silvia de Noruega han permanecido una semana confinados en palacio después de que se detectara un positivo entre sus empleados. La Casa Real emitía hace unos días un comunicado para hacer pública esta información, y este jueves, día prolífico para los departamentos de comunicación institucionales del Viejo Continente, han trasladado una buena noticia: que el matrimonio ha dado negativo en el test y que un día después, por tanto, retomaría su agenda oficial.
A principios de este mes también se conocía que el duque de Cambridge dio positivo en la enfermedad. En su caso no ocurría recientemente, sino que padeció coronavirus en abril, aunque no había trascendido hasta ahora. Fue tratado en aquel momento por los médicos de palacio y se decidió mantener el diagnóstico en secreto a fin de no alarmar "a la nación", dado que también Carlos de Inglaterra y el primer ministro británico, Boris Johnson, se encontraban en ese momento haciendo frente al COVID-19.