El trabajo como voluntaria de Sofia de Suecia en el hospital Sophiahemmet, uno de los más antiguos de Suecia, está dando mucho que hablar en los últimos tiempos. La mujer del príncipe Carlos Felipe realizó un curso, tras el cual comenzó sus labores el pasado abril para echar una mano durante la pandemia. En estos meses, la Princesa ha desinfectado camas, suministros y material médico, ha ayudado en la cocina y ha higienizado las instalaciones. Unas labores que han llamado la atención de la agencia de marketing Consid que la ha nominado para su premio Héroe del Covid. Sin embargo, el hecho de que se encuentre entre las finalistas del galardón ha levantado ampollas y algunas criticas y hay quien lo considera exagerado pues nunca ha llegado a estar en contacto directo con pacientes infectados ni los ha atendido, sino que más bien su trabajo sería de apoyo al personal sanitario. Así las cosas, la polémica ya está servida.
La compañía, una de las empresas de consultaría que más ha crecido en los últimos tiempos en Suecia, especializada en tecnologías de la información, gestión y marketing digital, justifica la nominación de la nuera de los reyes Carlos Gustavo y Silvia en que “eligió ponerse la bata blanca y trabajar en medio del epicentro de la pandemia (…) Ha sido aclamada en todo el mundo por sus esfuerzos contra el coronavirus”, reza en un comunicado en el que también informa que además de la Princesa optan a llevarse el galardón Ann Molin, directora de proyectos de Hack The Crisis Sweden, por su trabajo en “encontrar soluciones digitales concretas a la crisis que atraviesa el mundo debido a la COVID-19; Emma Frans, educadora por “su lucha por la educación pública en todas las plataformas imaginales” y Anders Tegnell, epidemiólogo en la Agencia Sueca de Salud Pública.
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Las reacciones no se han hecho esperar ya que parece que el voluntariado de Sofia en el hospital no sería tan crucial como lo pinta la agencia Consid, sino que se trataría de un trabajo de apoyo y hay muchos que creen que las posibilidades de que resulte premiada son escasas teniendo en cuenta las trayectorias de sus competidores. En cualquier caso habrá que esperar hasta el 21 de noviembre para que se desvele el resultado en una ceremonia virtual.
Fue la pasada primavera cuando la Casa Real sueca informó que Sofia iba a echar una mano a los sanitarios. Para ello había realizado un curso on line de tres días impartido por la universidad Sophiahemmet Högskola para poder trabajar en el centro hospitalario. Un día después de ese anuncio, el pasado 16 de abril, se pudieron ver las primeras imágenes de la Princesa con el uniforme de voluntaria, unas funciones en las que ha seguido tras el verano y que ha compatibilizado con sus tareas institucionales. Su decisión fue motivo de orgullo para la Familia Real y la Reina comentó en una entrevista en Aftonbladet que su nuera “realizó una breve formación sanitaria y ahora está ayudando al personal del hospital. Por supuesto que no es enfermera, pero está muy feliz de ayudar”, comentó.
Sofía de Suecia es una de las royals que más presencia mediática tuvo durante la primera oleada de la infección. Pero no fue la única. Sarah Ferguson y sus hijas colaboraron llevando material sanitario a los hospitales, el príncipe Harry y Meghan prepararon comida para enfermos crónicos en Los Ángeles (California); Máxima y Guillermo de Holanda han hecho varias visitas, la Fundación de la reina Sofía hizo una donación extraordinaria de leche a los Bancos de Alimentos y don Felipe y doña Letizia no pararon de treletrabajar y contactar con organizaciones de colectivos vulnerables y hospitales para conocer de primera mano la situación en nuestro país.