Sofia de Suecia y su tiara 'transformer'
Una tiara y mil posibilidades. La diadema transformer de Sofia de Suecia ha dado mucho juego en el último año en las citas de gala. Como volvimos a constatar en su última aparición en el Palacio Real de Estocolmo, la tiara nupcial se ha convertido en uno de los aderezos reales más camaleónicos: las puntas originales de esmeraldas son intercambiables. La estructura de hojas de palma lo mismo puede lucirse con perlas, que con brillantes, que sin adornos añadidos.
Sofia de Suecia o cómo resolver cada cita con un 'tres en uno'
Sofia de Suecia se inspira en su look de boda en la cuenta atrás de su aniversario
Boda Real de Carlos Felipe y Sofia de Suecia
Estrenó la pieza en su gran día. Aquel 13 de junio de 2015 Sofia Kristina Hellqvist dio el sí al príncipe Carlos Felipe y se convirtió en Princesa de Suecia, coronada con una diadema de brillantes y esmeraldas que había recibido como regalo de boda de los reyes Carlos Gustavo y Silvia. La nueva tiara, de impactante belleza, fue toda una sorpresa, pues muchos esperaban que luciera una de las históricas joyas más conocidas del tesoro real sueco.
Un halo de misterio rodeaba la diadema, que desapareció en las celebraciones de los Nobel de 2016, para reaparecer un año después en una de las veladas de palacio. Pero ya no era exactamente la misma: no lucía las nueve puntas de esmeraldas, dando la impresión de una tiara distinta. “Se realizó de esta manera para que pudiera cambiar de apariencia”, declaró la directora de Información de la Casa Real sueca, Margareta Thorgren, a la revista Swedish Women's Magazine.
Con ocasión de las celebraciones de los premios Nobel de 2017, volvió a salir del cofre y volvió a sorprender. La princesa Sofía se ciñó una vez más su tiara nupcial, pero esta vez con nueve perlas como remate. Un mes antes la había llevado de la forma más sencilla posible, solo con diamantes. Esta diadema, tres en una hasta la fecha, podría decirse que es su tiara de diario, lo que no quita que en ocasiones haya llevado algunas otras que a lo largo de los años han lucido la reina Silvia o las princesas Victoria y Magdalena, que por otro lado cuentan con regalos, herencias o piezas asignadas solo a ellas de forma histórica.
La tiara de la princesa Sofia tiene su propia historia. Muchos creían que Carlos Gustavo y Silvia de Suecia habían comprado la diadema a joyeros anticuarios de Londres o París, pero según indagó la publicación sueca Swedish Dam, la diadema nupcial era originalmente un regalo para la reina Silvia: “Un collar hecho expresamente para la reina Silvia, que recibió hace unos años como obsequio de un príncipe de la Casa Real tailandesa. Y fue este collar el que luego se reconvirtió en una diadema, cuando se tuvo la certeza de que el príncipe Carlos Felipe se iba a casar con la princesa Sofia. Con los Nobel de 2018 y su despliegue de glamour a la vuelta de la página, planea la pregunta si una nueva versión de la tiara coronará la cita grande de Suecia.