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En los últimos años la presencia de la princesa Magdalena en Suecia se ha visto reducida considerablemente, ya que la hija pequeña de los Reyes ha estado viviendo en Nueva York, en Londres y, desde hace un par de meses, en Miami. Este otoño su ausencia en actos oficiales da un paso más. Se ha confirmado que la Princesa no va a estar presente en la que hasta ahora ha sido una de sus noches imprescindibles: los Premios Nobel.
“La princesa Magdalena no va a participar en ningún acto oficial este otoño”, dice la portavoz de la Casa Real, Margareta Thorgren, a Svenskdam. “La razón es que ahora la Princesa vive en los Estados Unidos con su familia”, añade al ser preguntada por los motivos. De este modo el citado medio sueco viene a confirmar lo que era una especulación hasta ahora: la ausencia de la Princesa en la gran noche de la Real Academia Sueca.
Como todos los movimientos de Magdalena este tema está siendo muy comentado en el país, aunque lo cierto es que tanto la Princesa como su marido han sido la presencia más inestable en la gran noche de Estocolmo. En este sentido, hay que recordar que Chris O’Neill renunció al título de Príncipe, sus responsabilidades y beneficios en el momento de su boda con la Princesa, ya que deseaba poder seguir trabajando como financiero y no dedicarse a labores oficiales. De este modo el matrimonio y sus tres hijos, los príncipes Leonore, Nicolas y Adrienne, comenzaron este otoño una nueva vida en Miami.
El caso de Magdalena es algo distinto, aunque ahora la Casa Real deja claro que su función es trabajar para la fundación de la Reina Silvia desde los Estados Unidos, su menguada presencia como miembro de la Familia Real sigue siendo analizada con lupa, sobre todo porque su asistencia a los Nobel había sido constante en los últimos cuatro años. El año pasado acudió a la gala junto a su marido aunque, debido a su avanzado estado de gestación, no se quedó para la cena.
Así ha sido su relación con los Nobel
Hasta ahora la cita en la que el rey Carlos Gustavo otorga los galardones internacionales con más prestigio había sido un día marcado en rojo en el calendario de Magdalena, que ejercía de anfitriona con el resto de su familia e igual que la reina Silvia y la princesa Victoria aprovechaba para lucir las piezas más impresionantes del joyero real.
Hay que recordar que la Princesa debutó en esta cita, el acto social más importante de Suecia, en el año 2002 con veinte años y con un escotado vestido rojo que a día de hoy sigue siendo dando que hablar. Año tras año ocupó su lugar en el escenario junto a su hermano, el príncipe Carlos Felipe, y un paso por detrás de los Reyes y de su hermana, la princesa heredera Victoria. En el año 2009 incluso se pudo ver en la gala a Jonas Bergstrom, ejerciendo de prometido de la Princesa y a ella luciendo su anillo, meses después ella puso tierra de por medio instalándose en Nueva York, después de que su compromiso y su corazón se rompiera en pedazos.
En el año 2012 regresó con más brillo que nunca, y tras su ausencia el año anterio se convirtió en la gran protagonista con un vestido de novia del diseñador venezolano Angel Sánchez. En el año 2014 cambió el protocolo aprovechando la incorporación de la princesa Sofia y de Chris O’Neill a esta velada de la máxima etiqueta; ese año, en plena cuenta atrás para la boda de los príncipes Carlos Felipe y Sofia, se decidió que los únicos que conservarían sus asientos en el lugar de honor, es decir, sobre el escenario, serían los Reyes, la princesa Victoria y el príncipe Daniel. De este modo el resto de miembros de la Familia Real pasaron a ocupar la primera fila de la Sala de Conciertos de Estocolmo, un lugar en el que también se sientan algunas de las máximas autoridades y las hermanas del rey Carlos Gustavo.
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