Parece que las celebraciones no quieren abandonar a Carlos Gustavo de Suecia. No han faltado en las últimas semanas los motivos de brindis: el nacimiento de su última nieta, la princesa Adrienne, el pasado 9 de marzo en Estocolmo; su récord de 44 años y 223 días en el trono el pasado jueves, y su 72º cumpleaños hoy en el patio exterior del Palacio Real. Todos querían felicitar al rey Carlos Gustavo, así que este nuevo 30 de abril sus seres queridos volvieron a acompañarle desde el balcón, los niños volvieron a colmarle de flores y la banda de la guardia armada volvió a dedicarle el tradicional Cumpleaños feliz.
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Pero esta vez el brazo del homenajeado se ha quedado corto para acoger la infinidad de coloridos ramos de rosas, margaritas, lilas..., muchos de ellos con dibujos y dedicatorias, que han llegado a Su Majestad de manos de preciosas niñas suecas, con maneras de influencer, y hasta de un pequeño sueco, con vocación de campeón de MotoGP, que se ha acercado al soberano a la carrera a bordo de su triciclo deportivo rojo. Con todo un jardín a su atención, enarbolando una de las flores más llamativas, el rey Carlos Gustavo ha agradecido a la multitud congregada en su honor las tantísimas muestras de cariño recibidas.
También daba la sensación (aunque solo fuera eso: una impresión) de que esta vez el destacamento armado ha sido mayor; que las trompas, las trompetas, los trombones, los clarinetes y los tambores han tocado esta vez la fibra del público más que las sencillas notas de una popular melodía de felicitación, y que Estelle de Suecia esta vez ha tenido en su hermano pequeño a un igual. El príncipe Oscar ha dejado de ser el bebé que todos conocíamos y ha dado la réplica a la que hasta ahora ha sido la estrella del balcón. Ese mirador desde el que la reina Silvia, los príncipes Victoria y Daniel con sus niños, y la princesa Sofia asisten a una nueva celebración en el reino y saludan a sus admiradores.
La princesa Estelle, sueca hasta las uñas, ha vestido los colores del reino en los lazos de sus trenzas suecas y en su manicura especial para la ocasión, mientras que Oscar, más clásico, ha prescindido de ese tipo de guiños y se ha decantado por el perfecto atuendo de un minipríncipe azul. Ambos han hecho las delicias de todos. Rara vez hemos visto al príncipe Oscar haciendo muecas tan inesperadas como las de esta mañana, algunas de las cuales se han ganado un tirón de mofletes de la princesa Estelle como si con el gesto le advirtiera: ¡Eso, no! Pero nada grave. El feliz día terminó con un beso en la mejilla de la hermana mayor.
Y las celebraciones continúan. Asistiremos al bautizo de la princesa Adrienne el próximo 8 de junio, una fecha muy señalada ya que la princesa Leonore recibió ese mismo día las aguas bautismales y la princesa Magdalena y Chris O’Neill celebrarán además su quinto aniversario de boda. Y, antes de comenzar el nuevo curso, en septiembre, tal vez se marque de manera especial ese mencionado récord en el trono del rey Carlos Gustavo, que la Casa Real sueca ha destacado en su web oficial y redes sociales con fotos históricas y documentos de archivo de apoyo.
Carlos XVI Gustavo de Suecia se convirtió la pasada semana en el Rey de Suecia con el reinado más largo, habiendo superado el establecido por Magnus Eriksson (Magnus IV) en el siglo XIV. Si el 9 de septiembre de 2015, la reina Isabel II batía con 63 años, 7 meses y 2 días a su antecesora, la emblemática reina Victoria, este jueves era el turno de su homólogo sueco en el país escandinavo. Al igual que la Reina de Inglaterra, él también se proclamó Rey demasiado pronto: su padre, el príncipe heredero Gustavo Adolfo, había fallecido en un accidente aéreo en 1947, y sucedió a su abuelo, el rey Gustavo VI Adolfo, a su muerte el 15 de septiembre de 1973 con tan solo 27 años, aunque no fue coronado hasta cinco días después. Una fecha triste, una fecha histórica y, en cualquier caso, una fecha para recordar.