Magadalena de Suecia ha mostrado una estampa de lo más adorable de sus hijos pequeños. La princesa y su marido, Chris O’Neill, han formado una preciosa familia numerosa con Leonore, de 4 años, Nicolas, de 2 y Adrienne, que nació el pasado 9 de marzo. Poco a poco, la segunda hija de los reyes Carlos Gustavo y Silvia va adaptándose a su nueva vida con tres niños y ya nos ha mostrado cómo ha sido una de las salidas de su benjamina. En su perfil de Instagram, Magadalena ha compartido tres imágenes de lo más adorables de Nicolas y Adrienne en el establo, disfrutando de un día en la hípica.
En ellas, vemos al niño montando sobre un poni de color blanco. A Nicolas no le falta detalle y está equipado con su sombrero de equitación un plumas negro y unas botas. A lomos del equino -que luce una graciosa trenza en las crines de su parte frontal- se le ve muy seguro y encantando. Tanto es así que, en otra de las tres instantáneas, que Magdalena de Suecia ha publicado, se le ve recostado sobre el animal de lo más feliz, demostrando que tiene una conexión muy especial con el poni.
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Otra de las fotografías que han conquistado a los seguidores de la Princesa es una en la que se ve el capazo azul oscuro de Adrienne sobre el suelo del establo rodeado de paja. Encima de la niña, que solo tiene 15 días de vida, hay un caballo que acerca, con mucha delicadeza, su hocico hasta ella. Seguramente para olerla y poder darle calor y protección. La princesa no ha podido sentirse más feliz y orgullosa de sus pequeños y simplemente ha comentado las estampas con unos emoticonos de corazones y de un caballo. Este día entre animales ha provocado que sus seguidores se derritan con la ternura que desprenden sus hijos entre caballos. Desde bien pequeños, la princesa quiere transmitirles una de sus grandes pasiones: la hípica. Ella misma de niña mostró interés por la equitación y con una edad parecida a la de Nicolas se la vio subida a un poni. Más tarde participó en algunos torneos.
La pequeña Adrienne, a la que seguramente en unos años veamos acompañando a su hermano a las clases de montar, vino al mundo en el Hospital Danderyd de Estocolmo y pesó 3,465 kilogramos y 50 centímetros al nacer. La Casa Real sueca distribuyó su primera imagen unas horas después de que se anunciara su nacimiento. Tres días después, el Rey y la princesa Victoria se reunieron con representantes del Gobierno para comunicarles que la nueva princesa, décima en la línea de sucesión al trono se llamaría Adrienne Josephine Alice y que recibiría el título de Duquesa de Blekinge. Los segundos nombres de la pequeña son un homenaje a las abuelas y Adrienne se lo pusieron porque les gustaba a los padres. Según el medio sueco Svenskdam, este nombre es el que a la reina Silvia le hubiera gustado poner a la princesa Magdalena, un nombre poco común en Suecia, ya que solo hay 141 mujeres que lo lleven.