Los bautizos reales en Suecia siempre dejan imágenes inolvidables. Una mañana de salvas y celebraciones que en los últimos años son televisadas y a las que con frecuencia acuden miembros de otras casas reales. La Familia Real ya tiene una nueva celebración el calendario: será el próximo 1 de diciembre cuando sea bautizado el príncipe Gabriel.
El segundo hijo de los príncipes Carlos Felipe y Sofia de Suecia será bautizado en la capilla real del Palacio de Drottningholm, en Estocolmo, el mismo lugar en el que tuvo lugar el Bautizo Real de su hermano Alexander el 9 de septiembre de 2016, en donde se casó la princesa Magdalena y en donde fueron bautizados sus hijos –Leonore y Nicolas de Suecia-, a diferencia de Estelle y Oscar, hijos de la Princesa Heredera, que recibieron las aguas en el Palacio Real de Estocolmo.
Será el primer día en el Gabriel, el pequeño de la familia hasta que la princesa Magdalena tenga a su tercer hijo con Chris O´Neill, sea el protagonista ante las cámaras. Un día que siguiendo la tradición el Príncipe será bautizado con las aguas de la fuente real de la isla sueca de Öland y estrenará su escudo de armas y su monograma, diseñado por el artista heráldico del archivo nacional.
Para la cita, cargada de solemnidad y en la que en ceremonias anteriores ha contado con la presencia de unos 150 invitados, el pequeño Gabriel vestirá el histórico faldón de cristianar de los Bernadotte. Una prenda que estrenó el príncipe Gustavo Adolfo cuando fue bautizado en 1906 y que a lo largo de todo un siglo lo han usado todos los miembros de la Familia Real, un vestido que, desde 1935, lleva bordado en el forro los nombres de todos los príncipes con las fechas de sus bautizos.
Las piruetas de Leonore, los 'achuchones' de Estelle... El 'otro' Bautizo Real de Oscar de Suecia
En los cinco bautizos anteriores el feliz abuelo, el rey Carlos Gustavo de Suecia, con ocasión de esta ceremonia otorga a sus nietos su primera condecoración, que es además la más importante de la corona sueca, la Orden de los Serafines, una distinción que no usarán hasta su mayoría de edad.
Hay que recordar que el último bautizo de un nieto de los Reyes fue precisamente el de su hermano Alexander, que estuvo marcado por las enternecedoras imágenes del bebé jugando con su primo Oscar, al que habían bautizado solo cuatro meses antes. Eso sin olvidar a las siempre simpáticas Estelle y Leonore, a las que más les cuesta permanecer sentadas durante toda la ceremonia.