El bautizo de Alexander de Suecia ha sido el acontecimiento real de estos días. Una ceremonia celebrada en la capilla del Palacio de Drottningholm y plagada de tiernos momentos, de juegos de bebés, miradas de enamorados y coincidencias estilísticas... de la que HOLA.com ha dado buena cuenta. Mientras que el príncipe Alexander, Duque de Södermanland, primer hijo de los príncipes Carlos Felipe y Sofía, quinto nieto de los reyes Carlos Gustavo y Silvia, yquinto en la línea de sucesión a la Corona sueca, dio muestras de su temperamento tranquilo, dando razón a sus padres ("Es muy bueno"), sin llanto ni siquiera amago de puchero en el rito del bautismo, aunque con ojos bien abiertos observándolo todo con detalle, sus primas mayores hicieron una nueva entrega de "princesas a la fuga" y es que -como ocurrió este verano en el tradicional posado- la princesa Leonore fue la primera en "aburrirse" y marcharse hacia la puerta, la princesa Estelle resistió un poco más, pero también se vio tentada y finalmente siguió sus pasos ausentándose de la ceremonia unos minutos y el príncipe Nicolas, muy pequeño para seguir su ejemplo, aguantaba en los brazos de Chris O´Neill abrazándose con fuerza a su peluche. Momentos inolvidables que aún perduran hoy,
Para quienes se resistían a pasar página, esta mañana la Casa Real sueca publicaba las fotos oficiales del gran acontecimiento, que fueron tomadas por el fotógrafo Mattias Edwall. El buen comportamiento del príncipe Alexander durante el servicio religioso no había sido casualidad y también fue modélico en esta sesión fotográfica, en la que posó a sus casi cinco meses erguido y sonriente junto a sus padres, Carlos Felipe y Sofia de Suecia, sus abuelos, los reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia y Marie y Erik Hellqvist; sus tías, las princesas Victoria y Magdalena, por parte paterna, y Lina Frejd (Lina Hellqvist, antes de su boda el verano pasado) y Sara Hellqvist por parte materna, así como también junto a sus cinco padrinos que, además de los citados Victoria de Suecia y Lina Frejd, integraban Victor Magnuson, hijo de la princesa Cristina y, por tanto, sobrino del Rey; Jan-Åke Hansson, el que ha sido durante años el mejor amigo del Príncipe, al que conoció durante sus años en el internado de Lundsberg, el que organizó su despedida de soltero y el que ejerció de best man durante su boda, y Cajsa Larsson, la discreta amiga de la infancia de la princesa Sofia. Los retratos oficiales de uno de los momentos más dulces de sus vidas.
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