Las grandes celebraciones que le esperan a la Familia Real sueca
Abril y tal vez mayo se marca en rojo en las agendas reales con motivo del 70º cumpleaños de Carlos Gustavo de Suecia y del bautizo real del príncipe Oscar Carlos Olof
La Familia Real sueca tirará palacio por la ventana estos meses de celebraciones. Este abril de festejos mil se llenará de conciertos, recepciones, desfiles, cambios de guardia, servicios religiosos,desplazamientos en carroza, almuerzos y banquetes reales con los que se rendirá homenaje a Carlos Gustavo de Suecia por su 70º cumpleaños. La magnitud de los eventos por el aniversario del Rey sueco irá in crescendo y como broche final se espera la presencia de la realeza extranjera.
El cumpleaños del Rey, excusa para encontrarse Las invitaciones ya han sido enviadas como ha confirmado la propia Casa Real sueca, si bien todavía no se ha hecho pública la lista oficial de asistentes y por el momento se desconoce si los reyes Felipe y Letizia se desplazarán a Suecia para arropar al soberano en esta señalada ocasión, al igual que hicieran en abril de 2015 con motivo del 75º cumpleaños de Margarita de Dinamarca en el vecino país escandinavo, precedente de características similares. Pero no se puede obviar que las circunstancias son distintas, dada la situación de bloqueo político que vive España, y ya son varios viajes oficiales que don Felipe y doña Letizia se han visto obligados a suspender (Arabia Saudí, Reino Unido, Japón y Corea).
Serán unas celebraciones por todo lo alto. Por lo significativo de la fecha, por la calidad (y cantidad) de los invitados y porque a un Rey no le basta un día para agasajar a sus invitados. Cinco, desde el 25 al 30 de abril, han sido las jornadas que se dedicarán a este grandioso septuagésimo aniversario del Rey sueco, perfecta disculpa para encontrarse. El 29, en un concierto homenaje en el Museo Nórdico, seguido de una recepción para toda la Suecia oficial, familiares y amigos y miembros de la realeza extranjera.
Y el 30, día exacto del cumpleaños real, primero en un Te Deum (himno de gozo y agradecimiento), luego en un almuerzo en el Consistorio de Estocolmo; en una recepcion en el Palacio Real, y finalmente en un banquete en el Salón de Estado a los ilustres invitados. Todo ello, aderezado con recitales y desfiles; sin olvidar, el consiguiente saludo desde el balcón y el paseo, en carroza, por las vías principales del centro de Estocolmo, en las que el soberano (cuarenta y dos años en el Trono, desde que a los veintisiete años juró el cargo cuando, según sus propias palabras, “era un joven inseguro”) recibirá ilusionado las ovaciones de muchos de sus conciudadanos.
Bautizo Real... ¿padrinos reales? Mayo también acabará bien para la Familia Real sueca. Y es que los Bernadotte celebrarán el 27 de mayo el bautizo del pequeño Oscar Carlos Olof. La Casa Real sueca ha hecho pública la fecha y el lugar del bautismo del segundo hijo de Victoria y Daniel de Suecia, que será muy similar al de su hermana mayor, futura Heredera al trono, la princesa Estelle. Igual que ella, el príncipe Oscar tendrá prácticamente los tres meses cuando reciba las aguas bautismales, una edad ideal para lucir en todo su esplendor el histórico traje de cristianar, que han llevado también sus primos, los príncipe Leonore y Nicolas, además de su hermana, la princesa Estelle; su madre, la princesa Victoria, y su abuelo, el rey Carlos Gustavo, entre otros miembros de la Familia Real desde su estreno en 1906. Como su hermana, y a diferencia de sus primos, la ceremonia religiosa tendrá lugar enla misma iglesia del Palacio Real de Estocolmo.
No hay más datos oficiales, lo demás son suposiciones. Si las damas reales vestirán de Valentino, Gucci o Elie Saab como en bautizos anteriores, o si habrá representación real entre los padrinos como en el caso de la princesa heredera Estelle, que tuvo cinco padrinos, cuatro de ellos miembros de la realeza: el príncipe Haakon, el príncipe Guillermo, la princesa Mary, el príncipe Carlos Felipe y Anna Westling Söderström (hermana de Daniel). Lo más probable es que iguale en número a su hermana y, tal vez algunos de ellos, además de familiares y amigos, puedan ser también de condición real. Todo puede ser.
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