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La polémica no deja de crecer en Noruega a raíz del caso Marius, que suma ahora un nuevo capítulo. La noche del lunes, el hijo de la princesa Mette-Marit fue detenido. En el que es su tercer arresto en tres meses, se le acusa de violación, y aunque se declara no culpable, permanecerá bajo custodia policial hasta el miércoles. Esta delicada situación ha provocado un efecto dominó en la Casa Real con el registro que se ha llevado a cabo en los terrenos de Palacio y con las primeras palabras que el príncipe Haakon ha pronunciado al respecto.
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En el comunicado emitido por la policía de Oslo tras la detención de Marius Borg se detalla que se ha procedido a un registro en Skaugum, la finca real en la que residen los príncipes herederos y en la que también reside el hijo de la Princesa, aunque no bajo el mismo techo sino en una vivienda aparte de color rojo. El Palacio, situado en el municipio de Asker (es típicamente agrícola), tiene unos 1.000 metros cuadrados, está rodeada de un magnífico jardín de 150 decáreas en el que está la casa de Marius y ofrece una espléndida vista del fiordo de Oslo. Se trata un regalo de boda que recibieron de los Reyes e invirtieron casi cuatro millones de euros para reformarla y adaptarla a sus necesidades.
En el momento de la detención, que tuvo lugar cuando estaba en un coche cerca del recinto palaciego, el propio Marius fue registrado y se encontró un teléfono, al igual que en Skaugum. El objetivo de estos movimientos, según ha confirmado el abogado de la policía, Andreas Kruszewski, es "buscar pruebas en el marco de la acusación" del caso.
Las palabras del príncipe Haakon
Esta nueva detención ha coincidido con el viaje del heredero al trono nórdico a Jamaica, donde se ha trasladado como embajador de buena voluntad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo con el objetivo de encontrar soluciones sostenibles para los océanos, el clima y la pobreza. Haakon de Noruega, que el fin de semana acompañó a Marius a Londres para comenzar su rehabilitación, ha dicho: "Son acusaciones graves a las que Marius se enfrenta ahora. Hoy, por supuesto, pensamos en todos los afectados". En conversación con NRK, ha indicado que la policía y la justicia deben tener espacio para realizar su trabajo y se muestra convencido de que lo harán "de una manera adecuada".
Antes de su reunión con el primer ministro jamaicano Andrew Holness, ha indicado que no había sido informado con anterioridad de la detención y que le gustaría estar al lado de su esposa en estas horas tan complicadas: "Me gustaría estar en casa con Mette hoy. La extraño". Las últimas imágenes de la Princesa las distribuyó la Casa Real horas antes de la detención de Marius y en ellas aparecía visitando por sorpresa el campamento militar de Skjold en el que Ingrid de Noruega realiza su formación.
Será este miércoles cuando Haakon de Noruega regrese casa y se reúna con Mette-Marit. Sin embargo, no está previsto que haya comentarios oficiales sobre el nuevo arresto. Se trata de un asunto del que la Familia Real evita pronunciarse públicamente. Tan solo el Príncipe heredero ha hecho comentarios al respecto en un par de ocasiones (contando la de este martes) mientras que el rey Harald ha hecho referencia a las adversidades de forma generalizada: "Somos una familia, con las alegrías y los desafíos que todos sabemos que eso conlleva. Tanto en los buenos momentos como en los difíciles tratamos de apoyarnos mutuamente. A veces la vida es simplemente muy difícil. Es algo que todos pueden experimentar, incluida nuestra familia”.