Arrastrando dos maletas de un tamaño considerable, aparentemente solo y oculto tras una gorra, Marius Borg Hoiby salió de la sala de recogida de equipajes del aeropuerto italiano de Pisa en la tarde de este jueves 29 de agosto. Desde que fue detenido el día 4 de este mismo mes, después de una supuesta agresión a una mujer de 20 años con la que mantenía una relación sentimental que él mismo reconoció en un comunicado escrito en primera persona, sus problemas y los cargos contra él no han hecho más que crecer en una investigación en la que también han sido interrogadas dos de sus ex parejas. En Noruega la atención es máxima en torno al caso que implica al hijo que la princesa Mette-Marit tuvo antes de su matrimonio con el príncipe heredero Haakon, así que una cámara de uno de los principales medios del país le estaba esperando a su llegada a esta región italiana de la Toscana. 'De ninguna manera', respondió el hijo de la princesa cuando el periodista de VG le preguntó si quería hacer alguna declaración.
Entre el 'caso Marius' y la boda de la princesa Marta Luisa, desde hace semanas toda la atención del mundo royal se centra en Oslo. Así que parecía poco probable que el viaje del hijo de Mette-Marit, dos días después de prestar declaración oficial en la comisaría de Sentrum, pasara inadvertido. Su abogado, Øyvind Bratlien, ha tenido que salir al paso y ha explicado al citado medio que Marius viajó siguiendo su consejo. Pronto se ataron cabos al ver que el hijo de un multimillonario noruego celebra allí su boda este mismo fin de semana, sin embargo, el abogado negó que esto formara parte de sus planes. "No irá a la boda. Necesita paz", añadió Bratlien, el abogado que ha tenido desde el comienzo de este proceso y que ha brindado información a los medios de forma regular, siendo el único que ha hablado de este caso y la fuente a la que remite el príncipe Haakon en todas sus declaraciones.
Así que, según las declaraciones de su abogado, Marius ha llegado a Italia en busca de paz y no estará presente ni en la boda de la Toscana ni en la que comienza este mismo jueves en la ciudad noruega de Alesund, la que celebrará la unión de la princesa Marta Luisa y el chamán Durek Verrett. Hay que decir que su nombre, el de Marirus Borg, sí figura en la lista de invitados de la boda que reunirá este fin de semana a miembros de la realeza europea y a la que ¡HOLA! y su publicación hermana, HELLO!, tendrán acceso en exclusiva, sin embargo, el hijo de Mette-Marit ha preferido declinar esta invitación y directamente estar fuera del país. Su presencia habría eclipsado en algo el enlace y habría abierto nuevos interrogantes en torno a un caso que todavía no está claro si pasará o no factura a la Casa Real del rey Harald. A pesar que de Marius no pertenece a la institución y carece de un papel público, hay detalles en torno al uso del pasaporte diplomático, del modo en el que se efectuó su detención o de la charla que Mette-Marit mantuvo con la víctima antes de declarar que ponen en un posición incómoda a la princesa, que sí forma parte de la institución.
La noticia de su viaje a Italia ha provocado algunas dudas que la propia policía ha tenido que despejar en la cadena pública NRK: "La policía estaba al corriente de que el sospechoso se dirigía a Italia. Durante su ausencia no se han planeado nuevos interrogatorios". En esas mismas declaraciones se ha informado de que la policía noruega no solo está al corriente del viaje, también de la duración del mismo y de las fechas de entrada y salida del país; una información que habrían recibido a través del abogado que se encarga de la defensa de Marius.
Haakon de Noruega: 'Estamos unidos. Sabemos lo que Marius nos ha contado'
"Es un asunto serio y nos preocupa que todos los involucrados reciban ayuda y apoyo, que tengan buena gente a su alrededor”, dijo el príncipe Haakon a la cadena pública NRK a comienzos de esta semana durante su llegada a una feria sobre el sector energético en la ciudad noruega de Stavanger. Sus declaraciones, sobre la necesidad de ayuda de todas las partes, se explican por el impactante comunicado que emitió el propio Marius Borg, en primera persona y con la supervisión de su abogado, reconociendo la agresión del 4 de agosto, explicando que estaba bajo los efectos del alcohol y la cocaína, además de confesar que padece varios “trastornos mentales”.
“Este es un caso que ahora está en el sistema judicial, del que se ocupa la policía. De esa manera se escucha a todas las partes, lo cual es bueno. Y luego tengo mucha confianza en que lo hagan de manera ordenada, profesional y justa tanto en la policía como en el sistema judicial”, añadió el futuro rey en sus declaraciones de este lunes. Un mensaje previsible dada la imparcialidad y ejemplaridad que se exige a su figura como futuro jefe del Estado, pero en las que también quiso dejar claro que como familia se apoyan. “Estamos unidos. Sabemos lo que Marius nos ha contado y conocemos alguno de sus complicados problemas, pero no quiero entrar en detalles al respecto”, añadió el príncipe heredero al que sí veremos este fin de semana celebrando la segunda boda de su única hermana.