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El príncipe Haakon ha estado presente en el izado de la bandera arcoiris que ya ondea en un mástil frente al Ayuntamiento de Oslo y que ha dado comienzo a las celebraciones del Orgullo en la capital. El acto congregó a muchos vecinos que cada año se reúnen frente la Casa Consistorial para este sencillo acto cargado de simbolismo.
© Terje Pedersen / NTBEl Príncipe dijo que “es agradable participar en el izamiento de la bandera de este año y celebrar el amor, la diversidad y la libertad” y añadió la importancia de este acto después “del terrible atentado ocurrido el año pasado”. El 25 de junio de 2022 dos personas resultaron muertas a tiros y más de una veintena fueron heridas en un ataque contra un bar LGBTQ+ en el corazón de la ciudad. “Es importante que nosotros, en la sociedad en general, nos unamos a nuestros amigos queer. Noruega debe ser seguro para todos, sin importar quién eres o a quién amas”, ha dicho el heredero al trono. Junto al hijo de los reyes Harald y Sonia estaba la alcaldesa de la ciudad, Marianne Borgen, y el director de Oslo Pride, Dan Bjorke.
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© Terje Pedersen / NTBDespués de la tragedia del año pasado, los príncipes Haakon, Mette- Marit y su hijo Sverre Magnus se unieron a los homenajes que los noruegos hicieron en recuerdo y repulsa por el atentado del London Pub de Oslo. El rey Harald también hizo una declaración oficial en la que expresó que: “Mi familia y yo estamos horrorizados por la tragedia en la que murieron dos personas y muchas resultaron heridas. Lo sentimos por todos los que ahora están asustados, preocupados y afligidos. Debemos unirnos para defender nuestros valores: libertad, diversidad y respeto mutuo. Debemos seguir dando la cara para que todas las personas se sientan seguras. Ahora tenemos que cuidarnos mucho”.
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© Terje Pedersen / NTBEsta es la segunda vez que se ve al heredero a la Corona en público en los últimos días. La semana pasada disputó un partido de fútbol, pasado por agua, junto a su familia para potenciar el deporte inclusivo y un poco antes demostró su orgullo en la graduación de su hija mayor la princesa Ingrid quien está llamada a ser reina algún día.
