Queda menos de una semana para uno de los acontecimientos más esperados para la Familia Real de Noruega: la llegada a la mayoría de edad de la princesa Ingrid Alexandra. La primogénita de los príncipes Haakon y Mette-Marit cumple 18 años el próximo 21 de enero, comenzando así una nueva etapa para la que será primera soberana del país escandinavo por derecho propio en seis siglos. Además de realizar tres importantes visitas institucionales la víspera de su cumpleaños, el día que sople las velas la nieta de los reyes Harald y Sonia mostrará la parte más desconocida de su vida al conceder por primera vez una entrevista televisiva en la cadena pública NRK1.
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Esta charla no será emitida hasta las 19.40 horas, pero el canal ha mostrado ya un breve adelanto en el que se puede ver a la princesa Ingrid Alexandra vestida de negro y sentada sobre un sofá hablando con gran aplomo y tranquilidad. El telón de fondo de esta histórica entrevista es uno de los salones del palacio de Skaugum, la residencia oficial de los príncipes herederos de Noruega ubicada en la localidad de Asker, al suroeste de Oslo y junto a la montaña Skaugumsåsen. Una vez que finalice esta intervención, la citada cadena seguirá dedicando su programación a la nieta de los Reyes. Se verá un documental especial llamado 18 años con Ingrid que podría haber contado con la colaboración con los príncipes Haakon y Mette-Marit. En este programa se responderá a cuestiones como si puede crecer como un niño normal alguien que ha nacido para heredar al trono.
Ahijada del rey Felipe VI y de otros miembros de la realeza europea como Federico de Dinamarca o Victoria de Suecia, la princesa Ingrid Alexandra acudirá el 20 de enero al Storting (Parlamento noruego) para conocer el funcionamiento de la Asamblea Nacional. Su siguiente parada será la oficina del Primer Ministro para ser informada del trabajo del Gobierno y los ministerios. Por último visitará el Tribunal Supremo y a la jueza Toril Marie Oie. Otros actos para festejar su mayoría de edad se han cancelado por la crisis sanitaria. No habrá, por tanto, cena de gala en el Palacio Real y hay que buscar nueva fecha para la velada que el Gobierno iba a ofrecer en su honor en la nueva biblioteca Deichman Bjorvika de Oslo.
Ingrid Alexandra de Noruega, que nació en el hospital Rikshospitalet de Oslo y forma parte de la nueva generación de princesas, se ha preparado en estos últimos meses para el nuevo rumbo institucional que va a tomar su vida. Lo ha hecho conociendo más de cerca el día a día de Fuerzas Armadas de su país, de las que en un futuro será comandante suprema. Su última visitas fue especialmente llamativa ya que se lanzó en caída libre desde una torre de salto y voló con un F-16 en Bodø. En su cumpleaños, los militares la honrarán con un saludo desde todas las estaciones del país a las 12 horas con 21 disparos. En el futuro podría seguir la estela de su padre y su abuelo recibiendo formación castrense, una decisión que tendrá que tomar ella misma.
Amante del deporte y concienciada con el medioambiente
Más allá de sus actos oficiales, que se han visto incrementados desde hace unos dos años por su entrada de lleno en la adolescencia y a raíz de la fibrosis pulmonar que se le detectó a su madre, Ingrid Alexandra destaca como una gran amante del deporte. Es aficionada al surf disciplina que practica junto a su familia (por ejemplo en Formentera) y en la que ha ganado algún que otro campeonato. También se siente atraída por otras modalidades acuáticas, por el esquí y el kickboxing. Desde el otoño de 2020, acude a la escuela secundaria superior Elvebakken de Oslo, tras haber pasado por el colegio Janslokka en Asker, la Escuela Internacional de Oslo y la Escuela de Uranienborg, también en la capital del país. Además, está muy preocupada por el medioambiente.
El club de las futuras reinas de Europa
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