Han pasado más de cuatro meses desde que Ari Behn, el exmarido de la princesa Marta Luisa de Noruega, se quitará la vida. El 25 de diciembre de 2019, el escritor y artista se suicidaba a la edad de 47 años y dejaba tres hijas adolescentes. Una desgracia que conmocionó a la sociedad noruega y a la Familia Real, a la que perteneció durante quince años. Un trágico episodio del que todavía sus parientes y amigos no pueden pasar página ya que sus cenizas no han sidoenterradas por el coronavirus. Tras el funeral en la Catedral de Oslo, al que acudieron miembros de la realeza y una nutrida representación de la sociedad noruega, estaba previsto que sus restos mortales descansaran en el cementerio de Nuestro Salvador.
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La Familia Real emitió un comunicado cuando se confirmó la trágica noticia de su desaparición y las circunstancias en las que se había producido. Al poco de conocerse su pérdida, todo el país se llenó de velas para darle su último adiós y se estableció que el 3 de enero de 2020 se celebraría un funeral multitudinario. En la misa, su hija mayor, Maud Angelica dirigió unas emocionantes palabras dedicadas a su padre e hizo un alegato de ánimo y apoyo para aquellos que están sufriendo y no ven solución a sus problemas. Un discurso que le valió que el Foro Nacional de Psiquiatría la condecorada por hablar sin tapujos de los trastornos mentales y del suicidio a la vez que generaba esperanza.
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Cuatro meses después de que se hallara el cuerpo sin vida de Ari Behn, sus cenizas aún no han recibido sepultura en el camposanto, tal y como informa la revista Se og Hor. Estaba previsto que sus restos descansaran para siempre en el cementerio de Nuestro Salvador de la capital noruega, uno de los más populares de la ciudad y que en sus orígenes era el preferido de la burguesía. Quizá el hecho de que en sus terrenos se encuentren enterradas grandes personalidades, artistas y escritores hizo a Ari Behn desear ser inhumado en este singular lugar en el que está el célebre pintor Eduard Munch o el dramaturgo Henrik Ibsen. Por motivos sanitarios derivados de la crisis del COVID-19 la familia habría decidido posponer la ceremonia hasta que se pueda celebrar con familiares y amigos, según han comentado los padres de Ari a la revista.
A pesar de llevar casi tres años divorciados, Marta Luisa de Noruega tenía un gran cariño por el padre de sus tres hijas y su relación era tan cordial que habían pensado pasar la pasada Navidad juntos, en familia y con el novio de la Princesa, el chamán Durek Verret. Finalmente, esos planes nunca pudieron llevarse a cabo y desde entonces, la hermana de Haakon de Noruega se ha volcado en que Maud Angelica, Leah Isadora y Emma Tallulah sobrelleven de la mejor manera posible la pérdida de su padre.