El rey Harald de Noruega ha tenido un mes de enero complicado. Después de unas navidades muy tristes, tras el suicidio de Ari Behn, exmarido de la princesa Marta Luisa, el monarca, de 82 años, ingresaba en el Hospital de Oslo, el 8 de enero por sentir unos mareos, que finalmente fueron un episodio de vértigo. Siete días después recibía el alta, tras haber permanecido en el centro hospitalario haciéndose pruebas. Ya en Palacio, el soberano estuvo unos días de baja hasta que esta misma semana ha retomado su agenda oficial. Su recuperación ha sido total y por ese motivo la Casa Real ha anunciado un viaje de estado de dos días de los Reyes a Jordania previsto para el 2 de marzo.
La visita comenzará en la capital del país, Amán, y responde a la invitación que han cursado el rey Abdalá y la reina Rania de Jordania, en el que será la primera gira oficial de Harald y Sonia de Noruega a Oriente Medio. La última vez que ambos matrimonios reales coincidieron de manera institucional fue hace 20 años cuando los reyes jordanos visitaron Noruega en viaje de Estado.
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Está previsto que a su llegada los Reyes nórdicos sean recibidos con una ceremonia de bienvenida y entre los actos que protagonizarán visitarán una escuela para niñas en la ciudad de Salt y recorrerán Petra, donde podrán disfrutar de la inigualable arquitectura de edificios con fachadas esculpidas directamente en la roca, que desde 1985 forma parte del Patrimonio Mundial de la Unesco y desde 2007 forma parte de las nuevas siete maravillas del mundo moderno. Con este tour se pretende brindar “una oportunidad para explorar nuevas perspectivas de cooperación comercial entre Jordania y Noruega”.
Además de anunciar este compromiso internacional, esta semana, el rey Harald participó en un almuerzo para los miembros de la Corte Suprema en el Palacio Real, donde estuvo acompañado por su hijo, el príncipe Haakon, que ha actuado como regente durante las semanas en que su padre se recuperaba de sus problemas de salud. Así, el heredero al trono acudió el pasado lunes al 75 aniversario de la liberación de Auschwitz, donde coincidió con los reyes Felipe y Letizia, Guillermo y Máxima de Holanda y Felipe y Matilde de Bélgica, entre otros miembros de la realeza europea.
El último ingreso de Harald de Noruega ha sido el segundo percance en su salud que ha sufrido en menos de un mes. El pasado diciembre sufrió una infección vírica que le impidió, entre otras cosas, presidir el Consejo del Reino, tarea que hizo el príncipe Haakon.