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El pasado 20 de noviembre, el príncipe Andrés, duque de York, anunciaba su decisión de retirarse de la vida pública como consecuencia del escándalo Epstein. Su relación de amistad con el multimillonario Jeffrey Epstein y su posterior entrevista en televisión le pasaron factura hasta el punto de tomar la decisión de apartarse de la Casa Real en aras de protegerla. Parecía que las aguas habían vuelto a su cauce tras el cortafuegos instaurado en Buckingham, pero nada más lejos de la realidad. Este lunes, un nuevo royal se ha visto salpicado por el caso y, de nuevo, ha tocado pedir disculpas.
El 'caso Epstein': las claves que han llevado al príncipe Andrés a apartarse de la vida pública
Ha sido uno de los principales periódicos de Noruega, Dagens Næringsliv, el que ha desvelado que la princesa Mette-Marit mantuvo varias reuniones con el financiero estadounidense entre los años 2011 y 2013. En aquel momento, el multimillonario ya había sido condenado en Estados Unidos por abusos a menores, lo que ha levantado algunas ampollas. De ahí que la esposa del heredero Haakon de Noruega se haya apresurado a pedir disculpas y a aducir que no tenía conocimiento del delictivo pasado de Epstein.
"Nunca hubiera tenido nada que ver con Epstein si hubiera sido consciente de la gravedad de sus actos criminales. Debería haber investigado su pasado y lamento no haberlo hecho", ha explicado a lo largo de un comunicado que ha hecho llegar a DT (Dagens Næringsliv) y en el que reconoce, entre otras cosas, que conoció a Epstein en el extranjero por mediación de amigos comunes y que la mayoría de estos encuentros -en los que solían estar presentes más personas- se produjeron en la casa del financiero en Estados Unidos, aunque hubo alguna que otra reunión en Oslo.
"A lo largo de mi trabajo en temas de salud internacional, he observado de cerca los enormes daños del abuso sexual infligido a niños y mujeres. Todos tenemos la corresponsabilidad de luchar contra el abuso sexual y apoyar a las víctimas, y quiero expresar mi profunda simpatía y solidaridad con las víctimas de los abusos que Jeffrey Epstein ha cometido", prosigue el comunicado de Mette-Marit, en cuya defensa ha salido Guri Varpe, responsable de comunicación del palacio.
Este último ha certificado que la princesa "desconocía los actos criminales por los que fue condenado y cumplió una pena de prisión". En 2013, al parecer, decidió cortar lazos con él porque sentía que se estaba aprovechando de su relación con ella. Varpe también ha desvelado que el príncipe Haakon conoció al estadounidense durante unas vacaciones en St. Barts en el año 2012 cuando él y Mette-Marit iban por la calle.
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