HOME / Realeza / Mónaco Charlene de Mónaco: Sí, soy Princesa Ha hecho valer por todo el mundo su título con sello propio y, a sus éxitos de los últimos meses, ahora suma la Gran Cruz de la Orden de San Carlos con la que el príncipe Alberto la ha reconocido 26 de Noviembre de 2012 - 11:40 CET por HOLA.com Galería: 15 Fotos Volver a la noticia 1/15 Un bello retrato de la princesa Charlene en el Baile de Lys, en La Toscana 2/15 La princesa Charlene, a su llegada a la tradicional entrega de alimentos de la Cruz Roja a los mayores monegascos 3/15 Alberto y Charlene de Mónaco, acompañados por la princesa Estefanía, hacen entrega a los mayores monegascos de las ayudas de la Cruz Roja 4/15 Foto de familia de Charlene y Estefanía de Mónaco y los mayores monegascos, tras el reparto de alimentos de Cruz Roja 5/15 Alberto y Charlene de Mónaco, durante su viaje oficial a Polonia 6/15 Alberto y Charlene de Mónaco en un almuerzo organizado por la fundación Princesa Grace (Estados Unidos), duarante su viaje a Nueva York 7/15 Charlene de Mónaco celebró con pasión la victoria de su compatriota el nadador sudafricano Chad Le Clos, que arrebató el oro con un tiempo de 1:52.96 al gran favorito, el laureadísimo estadounidense Michael Phelps 8/15 Charlene de Mónaco, antes de regresar a casa, disfrutó del otoño en Nueva York 9/15 Charlene y Carolina de Mónaco protagonizan en cada aparición conjunta un duelo de elegancia 10/15 Un bello retrato de Charlene de Mónaco 11/15 Charlene de Mónaco, durante su estancia en París 12/15 Alberto y Charlene de Mónaco, a su llegada al Café de París para asistir a la gala Un toque de África 13/15 Charlene de Mónaco desplegó rouge charme a su llegada a una exposición de joyas de Van Cleef & Arpels 14/15 Charlene de Mónaco, enfundada en un vestido blanco tornasolado de satén con cuello halter y maquillada y peinada de fiesta, homenajeó a su manera a la princesa Grace y fue la reencarnación del antiguo glamour de Hollywood 15/15 La princesa Charlene arrancó embelesadas miradas a su orgulloso marido, el príncipe Alberto, y suspiros a los testigos de su romántico vals en el Baile de Lys de La Toscana Más sobre: Charlene de Mónaco Transformación