Andrea, Carlota y Pierre Casiraghi presiden por primera vez y en solitario un Baile de la Rosa marcado por el fallecimiento de la princesa Antoinette
Pese a la ausencia de Alberto de Mónaco, Charlene Wittstock y las princesas Carolina y Estefanía, Andrea, Carlota y Pierre Casiraghi fueron unos perfectos anfitriones poniendo de relieve su gran capacidad para representar con soltura los compromisos oficiales de la Casa Real monegasca