Ha llegado el verano y, un año más, la familia Grimaldi cumple con una de sus tradiciones estivales: navegar a bordo del ‘Pacha III’. El yate que Stefano Casiraghi regaló a Carolina de Mónaco en 1989 es el preferido de la princesa, que suele surcar las aguas del Mediterráneo por estas fechas en compañía de sus hijos y sus nietos.
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En esta ocasión, lo ha hecho con su hija pequeña, Alexandra de Hannover, y el novio de esta, Ben-Sylvester Strautmann. El joven de origen alemán, de 24 años —la misma edad que Alexandra—, es, desde hace tiempo, uno más en la familia de su novia, y las fotografías que acompañan estas líneas así lo demuestran.
Se conocieron en noviembre de 2016, en una carrera solidaria, y en 2017 hicieron su primera aparición pública
La pareja y Carolina llegaron juntos a la localidad siciliana de Taormina, donde Alexandra y Ben-Sylvester protagonizaron un apasionado y romántico beso con el que celebran nada menos que siete años de relación. Los jóvenes se conocieron en noviembre de 2016, en una carrera solidaria, pero no fue hasta un año más tarde, en 2017, cuando hicieron su primera aparición juntos en un acto deportivo.
La confirmación de su relación llegaría el año siguiente, en una de las citas más importantes de Mónaco, el Baile de la Rosa. Ahora, tras más de un lustro de relación, todo apunta a que, próximamente, Ben-Sylvester se convertirá en el yerno de Carolina, y el Principado espera con ilusión el anuncio de un compromiso que, a juzgar por las fotografías, podría estar cada vez más cerca.