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Charlene de Mónaco ha hablado alto y claro sobre los últimos rumores que se ciernen sobre ella y su siempre comentada relación con su marido, el príncipe Alberto. La Princesa acudió este martes con su hija, la princesa Gabriella, a la entrega de premios de la Semana de la Moda de Montecarlo, donde derrochó glamur, y dio unas declaraciones con las que ha roto su silencio y ha respondido a todas las cuestiones que atañen al último año de su vida. Sobre los rumores de divorcio o de una nueva residencia en Suiza se ha mostrado tajante: "Me parece lamentable que ciertos medios propagen tales rumores sobre mi vida, mi relación", ha dicho en Monaco Matin.
© Gtresonline
Muy guapa, con un vestido claro con transparencias, la Princesa se vestía de largo por primera vez en más de un año, el tiempo en el que ha estado alejada de la vida pública del Principado por culpa de una severa infección otorrinolaringológica, que la ha mantenido alejada durante 15 meses de sus deberes institucionales. Algo molesta a juzgar por sus palabras, la exnadadora subrayó a la publicación monegasca que por las características de su posición, su familia está expuesta a los medios y "la más mínima debilidad se transmite", señaló.
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A pesar de su larga convalecencia, primero durante varios meses atrapada en Sudáfrica -su país natal- al no poder coger un vuelo ya que no hubiera podido soportar la presión dentro de la cabina del avión, que ha incluído varias operaciones quirúrgicas, un internamiento en una clínica de Europa y estar alejada de Mónaco, asegura que siempre ha podido contar durante estos largos meses con el apoyo de su esposo. "Alberto ha sido un gran apoyo, hablamos sobre esos artículos maliciosos juntos y ha hecho todo lo posible para protegernos a nuestros hijos y a mí".
© Getty Images
En su tercer acto público tras recuperar su agenda oficial también ha querido arrojar luz sobre cómo se encuentra y mandar un mensaje tranquilizador a los monegascos. Asegura que su familia es su prioridad y reconoce que su estado de salud "todavía es frágil y no quiero ir demasiado rápido. El camino ha sido largo, difícil y muy doloroso", aunque se encuentra "más serena". También ha dado las gracias por todas las muestras de cariño que ha recibido durante su convalecencia: "He recibido muchos mensajes positivos y calurosos cuando estaba lejos de Mónaco y agradezco el apoyo".
© Cordon PressCharlene de Mónaco retomó su agenda de Princesa el pasado 30 de abril cuando apareció junto a su marido y sus hijos en el campeonato de la Fórmula E. Una semana después, la escena se repetía en el torneo de rugby de Santa Devota. Sin embargo, posteriormente a estos actos, en los que aparecía mucho más recuperada y con buen aspecto, saltaban a la actualidad los rumores de un supuesto contrato entre la pareja principesca que habría condicionado la vuelta de la sudafricana. Se trataría de un acuerdo económico según el cual Charlene participa en algunos compromisos públicos, mientras reside en Suiza, según la revista francesa Voici. Charlene recibiría 12 millones de euros a cambio de burlar un divorcio oficial y obligarla a ejercer de Princesa en determinados actos. Cumplida esta parte, podría vivir en Ginebra (Suiza), pero sin sus hijos a los que, según este supuesto acuerdo ultraconfidencial, podría visitar siempre que quisiera.
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