Estefanía de Mónaco reapareció el pasado fin de semana en la vida social del principado para cumplir con la que ha sido su causa principal desde hace dos décadas: la gala solidaria para la lucha contra el SIDA. La Princesa hizo su aparición en el Sporting Club de Montecarlo acompañada de sus tres hijos. El mayor, Louis Ducruet, acudió con su mujer, Marie; y la pequeña, Camille Gottlieb, estuvo acompañada por un amigo que no posó en las fotos oficiales. Sin embargo, fue Pauline Ducruet la que se convirtió en la protagonista de la noche al posar, junto a su novio, el empresario Maxime Giaccardi, haciendo unos gestos que han disparado en las últimas horas los rumores en torno a un posible embarazo.
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Son gestos como este, repetidos en todas y cada una de las fotos de esta noche, lo que ha hecho que muchos se pregunten si la que un día fue la princesa rebelde de Europa está a punto de cumplir una nueva etapa y estrenarse como abuela. Hay que recordar que a diferencia de su hermana Carolina, que es abuela “numerosa”, Estefanía de Mónaco, de 56 años, todavía no ha vivido esa experiencia.
Pauline Ducruet, la hija que la princesa tuvo con su guardaespaldas, Daniel Ducruet, cumplió 27 años el pasado mayo y tiene una relación con el empresario monegasco Maxime Giaccardi desde hace años. De hecho, se puede decir que él es un amigo de toda la vida. Era él quien visitaba a Pauline durante el tiempo que ella estuvo estudiando diseño de moda en Nueva York y hace tiempo que saltaron la barrera de aparecer juntos en actos públicos, dotando de una especie de “oficialidad” a su noviazgo e incluso haciendo que algunos se pregunten si suenan de nuevo campanas de boda en Mónaco.
Como se puede ver la pareja vistió a juego (haciendo un guiño a la temática de una noche inspirada en el grupo sueco de música pop ABBA) y estuvo intercambiando expresiones como esta durante toda la noche. Pauline Ducruet apostó por las líneas rectas y por un diseño de su firma, como siempre que hace una aparición pública, sin embargo, esas líneas rectas no impidieron que se convirtiera en el centro de todas las miradas al realizar gestos constantes en torno a su vientre. Ya se sabe que los monegascos ni confirman ni desmienten, así que será cuestión de tiempo el saber si los rumores son ciertos o no.
Las imágenes que Pauline Ducruet eligió horas después para compartir en sus redes sociales tampoco han venido a aclarar mucho, más bien todo lo contrario. Desde luego hay algo que la sobrina del jefe del Estado monegasco ha conseguido con creces y es que todos (medios franceses e italianos también) estén haciendo circular unas imágenes en las que este diseño camisero en color champán es el protagonista.