Alberto de Mónaco fue uno de los primeros miembros de la realeza en contraer el coronavirus a mediados del mes de marzo, pero afortunadamente ya se encuentra totalmente recuperado y a pleno rendimiento. Poco a poco los países europeos, cada uno a su ritmo, van recuperando cierta normalidad y eso también se refleja en las actividades de los 'royals'. El hijo del príncipe Rainiero ha reanudado su agenda oficial con una visita a un centro de pruebas de coronavirus, donde le hemos visto muy respetuoso con los protocoloso de higiene y seguridad y también con un aspecto muy sonriente y relajado.
Primeras imágenes de Alberto de Mónaco tras recuperarse del COVID-19
Sin quitarse la mascarilla en ningún momento, el jefe del Estado monegasco llegaba al centro de detección del COVID-19 realizando el choque de antebrazos como saludo, una forma menos protocolaria pero mucho más conveniente por razones de higiene que el tradicional apretón de manos. Durante su recorrido por el centro, ha hablado con el personal y ha visto cómo realizaban algunos test antes de someterse él mismo a uno. Después de tomarle la temperatura en diferentes momentos de la visita, el príncipe se sentó para corroborar que el resultado al virus continúa siengo negativo. Mientras el personal sanitario le extraía la muestra, guiñaba un ojo a la cámara y levantaba el pulgar muy confiado en el buen hacer de sus recién adquiridos anticuerpos.
Es el primer acto oficial al que acude Alberto de Mónaco después de dos meses con los eventos públicos paralizados por la pandemia global. No obstante, tras recuperarse del virus, que le mantuvo semanas separado de su esposa Charlene y de los mellizos, Jacques y Gabriella, prosiguió con su trabajo de manera virtual. Tras reecontrarse con su familia, felicitó la Pascua a los monegascos a través de un vídeo. Desde el Palacio de Roc Agel grabó un mensaje con su mujer, en la que fue su primera aparición pública juntos en casi tres meses.
Alberto de Mónaco se aprieta el cinturón ante la crisis
Durante la crisis, además de teletrabajar como han hecho la mayoría de sus homólogos europeos, el príncipe de Mónaco tomó una decisión insólita: reducir en un 40% el presupuesto que el Estado otorga al funcionamiento de Palacio. En un comunicado, expresaba su preocupación ante “el gran impacto que tendrá el COVID-19 en el presupuesto del Estado con un déficit previsto de casi 500 millones de euros para el año fiscal 2020", por lo que decidió meterle tijera a la dotación pública anual de Palacio que pasará de 13,2 millones de euros a 8 millones.
Con esta visita al centro de pruebas del COVID-19, retoma su agenda oficial, aunque este fin de semana ya le hemos podido ver en público en una faceta muy poco habitual para un príncipe, aunque no hay que olvidar que éste es hijo de Grace Kelly. Cuando estaba previsto que se celebrase el Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1, el director cinematográfico Claude Lelouch quiso hacer un remake de su corto C'Était un rendez-vous, de 1976, y que muestra un recorrido a toda velocidad por las calles de París. Para grabar este homenaje al emblemático filme, el cineasta, de 82 años, trasladó la acción a Montecarlo y contó para el reparto con el piloto de Ferrari Charles Leclerc y con el mismísimo Alberto de Mónaco.