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Buenas noticias para Alberto de Mónaco, que ha sido declarado curado por la infección de coronavirus que le fue diagnosticado hace casi dos semanas, el pasado día 19. Así lo ha comunicado el Palacio monegasco, asegurando que el marido de Charlene se encuentra bien y que pronto podrá unirse a ella y a sus mellizos, Jacques y Gabriella, en casa para continuar trabajando mientras el Principado se recupera, al igual que el resto del mundo, de esta enfermedad. En el texto que ha hecho público, el soberano pide a los ciudadanos que sigan cumpliendo las reglas que se han establecido, al igual que en España, para el deseado aplanamiento de la curva.
© Palais Princier- Alberto de Mónaco explica cómo está tras dar positivo en coronavirus y cómo se encuentra su familia
"Los médicos que monitorizan al príncipe Alberto II después del comienzo de su infección de COVID-19 le autorizan hoy a poner fin a su periodo de cuarentena. El príncipe soberano es declarado curado y con buena salud. Pronto se unirá a su familia y continuará el período de confinamiento mientras permanece en contacto cercano con el Gobierno y sus colaboradores cercanos", explica el Palacio monegasco. Su Alteza Serena una vez más recuerda a la gente de Mónaco la importancia de respetar escrupulosamente las medidas de confinamiento y limitar el contacto con los demás. El cumplimiento riguroso de estas reglas ayudará a detener la propagación del coronavirus", finaliza el comunicado.
Este domingo, Alberto de Mónaco ya aseguraba encontrarse mejor en una entrevista concedida a Corriere della Sera: "Ya no tengo fiebre y la tos ha mejorado". Durante su tiempo de aislamiento seguía encargándose desde casa de sus compromisos profesionales y llamaba varias veces al día a su mujer, y a sus hijos de cinco años, a los que echaba profundamente de menos. "Sueño con volver a Charlene y los gemelos la próxima semana", reconocía.
© GtresonlineEn una entrevista telefónica con Monaco Matin, el hermano de Carolina y Estefanía contaba un día después de dar a conocer su positivo que fue el día 16 cuando se sometió al test porque empezó a encontrarse mal, aunque no tenía fiebre alta. Durante este tiempo ha estado haciéndose los controles de temperatura recomendados y ha estado siendo tratado con paracetamol. El positivo del monarca se vivió en algunos sectores con cierta preocupación ya que en 2018 padeció una neumonía pero en esta ocasión los síntomas fueron más leves y pudo continuar trabajando en el despacho de sus apartamentos privados.
El hijo de Rainiero de Mónaco y Grace Kelly había cancelado ya los actos sociales del Principado como el tradicional Baile de la Rosa -que se hubiera celebrado el 21 de marzo-, y había también tomado estrictas medidas para el personal que trabaja a su lado. "En estos días trabajamos con la mitad de personal", aseguraba la pasada semana, consciente de que esa es la única manera posible de evitar la propagación. Además, reconocía que la situación no era fácil a la hora de pedir a los ciudadanos que se quedaran en sus hogares: "Yo sé que soy un privilegiado y que estar en una casa normal con hijos es un sacrificio, pero hay que hacerlo".
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