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La pandemia del coronavirus ya ha afectado a jefes de Gobierno y miembros de la realeza. Este mismo viernes se ha informado del positivo de Boris Johnson, primer ministro británico, y el miércoles saltó la noticia del contagio de Carlos de Inglaterra. El heredero al trono tiene 71 años y se encuentra en la franja de edad más vulnerable. Aun así su estado es bueno y está pasando el confinamiento en su casa escocesa de Balmoral. Mucho se ha especulado sobre cómo podría haberse infectado, algo que resulta difícil por el elevado número de actos públicos que tiene. Sin embargo, el príncipe de Gales coincidió quince días antes de que se sometiera a la prueba con Alberto de Mónaco, primer monarca que dio positivo en COVID-19. Para zanjar polémicas y explicar esta reunión que ambos príncipes mantuvieron, el hijo de Raniero se ha pronunciado al respecto.
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El marido de la princesa Charlene, de 62 años, ha hablado sobre el acto en el que estuvo con el príncipe de Gales el pasado 10 de marzo: un evento de Water Aid en Londres en el que se debatió sobre el cambio climático y la accesibilidad al agua potable. “Participé en una mesa redonda de su fundación, pero nunca nos dimos la mano. Él estaba en el otro extremo de la mesa, muy lejos”, ha dicho a la cadena de radio RTL. “Nos saludamos, pero no creo que pueda ser acusado de haberlo contagiado”, prosigue el jefe de la Casa Grimaldi mientras añade: “Había muchas otras personas en el centro de congresos y sé que continuó con su agenda durante varios días, así que tuvo otras ocasiones para infectarse”.
Mientras, y a falta de un ‘culpable’ claro, el padre de los príncipes Guillermo y Harry se ha aislado en su casa escocesa de Balmoral. El príncipe Alberto también permanece en sus apartamentos privados. Ambos presentan síntomas leves y continúan trabajando en sus compromisos gracias a la tecnología. En una entrevista en People, el hermano de las princesas Carolina y Estefanía relató que los síntomas que tenía eran “similares a los de la gripe”. “Tengo un poco de fiebre y un poco de tos. Los primeros días tenía los ojos llorosos y fue la primera señal, pero no es para tanto”, explicó entonces. Pese a su buen estado físico el jefe de Estado del Principado debe cuidarse pues hace dos años sufrió una neumonía.
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En la conferencia en la que participaron los príncipes Alberto y Carlos también estaban presentes líderes empresariales de todo el mundo, representantes del Gobierno y otras personalidades. Todos ellos evitaron saludarse con un apretón de manos –para evitar el contagio-, pero sí compartieron mesa separados a pocos centímetros. Entre los participantes se encontraba Lord Goldsmith, ministro de Medio Ambiente, y representantes del Banco Muncidal y de la multinacional Unilever.
Carlos de Inglaterra es el primer miembro de la Familia Real británica en contraer la infección. Sin embargo, es el tercer miembro de la realeza en cuarentena por el virus tras el positivo de Alberto de Mónaco y el del archiduque Carlos de Habsburgo-Lorena, que reveló hace más de dos semanas que estaba enfermo. Los reyes Felipe y Letizia también se realizaron el test que arrojó un resultado negativo.