El Principado volvió a ser testigo del encantador vínculo que une a los mellizos
Como cada año, Alberto y Charlene de Mónaco desempeñaron un papel fundamental durante el señalado día de santa Devota, patrona de Principado. Una joven santa martirizada en 304 en Córcega, cuyo cuerpo fue depositado en un bote por pescadores, que habría encallado en la costa monegasca.
No es raro ver a Jacques y Gabriella de Mónaco junto a sus padres en las citas oficiales de mayor tradición del calendario del Principado. Y anoche se unieron a los príncipes Alberto y Charlene precisamente con ocasión de la festividad de Santa Devota, en la que los mellizos volvieron a dar muestra de su encantador vínculo.
Era un fin de semana muy especial para la Familia principesca por varios motivos. Además de las festividades de la patrona de Mónaco, la princesa Charlene celebraba el mismo sábado su 42º cumpleaños. Probablemente le esperara una fiesta sorpresa con infinidad de regalos, a cuál más fantástico. Pero de las muchas felicitaciones que recibió en su día la más tierna del mundo llevaba la firma de sus mellizos, que le cantaron Feliz cumpleaños, mami, tal y como compartió con sus admiradores de redes.
Como en el Día Nacional, Jacques y Gabriella de Mónaco se mostraron en esta ocasión también muy alborotados. Y, más de una vez, los mellizos se estrecharon en un cariñoso abrazo por la emoción del momento.
El estilismo de los Grimaldi no es cuestión baladí en ninguna de sus grandes apariciones oficiales. El príncipe Jacques vistió para la ocasión un abrigo de corte masculino y camisa azul como sus ojos y la princesa Gabriella lució un holgado abrigo de color rojo como la bandera nacional y una delicada diadema de cadena de strass, que recordaba a una primera tiara.
La princesa Gabriella encontró seguridad y cobijo en los brazos de su hermano, el príncipe Jacques.
A su corta edad, cinco años cumplidos apenas hace un mes, el 10 de diciembre, la princesa Gabriella ya da las primeras señales de la belleza y del estilo de las damas Grimaldi.
Los monegascos les brindaron una cálida bienvenida al príncipe Alberto y su familia frente a la iglesia de Santa Devota, donde les aguardaban otro frío 26 de enero desde primera hora de la tarde.
La princesa Gabriella encendió el día de Santa Devota con adorable encanto.
La princesa Charlene, radiante con uno de los cortes de moda del año, se resguardó de las frías temperaturas invernales del Día de Santa Devota con un elegante abrigo azul klein de Louis Vuitton.
Alberto y Charlene de Mónaco asistieron con sus mellizos al Santísimo Sacramento antes de presenciar la tradicional conflagración del simbólico barco en la explanada de la iglesia dedicada a Santa Devota.