Como cada 19 de noviembre, la familia Grimaldi ha celebrado junto a sus compatriotas el día grande del Principado. La Fiesta Nacional de Mónaco se ha convertido, un año más, en una de las grandes citas sociales de la temporada.
La familia Grimaldi casi al completo ha acompañado al Príncipe Alberto durante todas y cada una de las celebraciones que componen los festejos de este día. En esta edición, la Fiesta Nacional ha recuperado el esplendor que la caracteriza, diluido el último año en solidaridad con el luto por los atentados de París.
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La agenda de actividades, ya repleta de festejos, ha comenzado, como es tradición, con la misa Te Deum oficiada en la Catedral de Monte Carlo por el Arzobispo de Mónaco ante la atenta mirada de los miembros de la Familia Principesca en la primera aparición oficial de la jornada.
A continuación, la comitiva principesca se ha desplazado a Plaza de Palacio - decorada con los colores del Principado para la ocasión-, donde rodeados de una gran multitud de ciudadanos y turistas, los Grimaldi han disfrutado del plato fuerte de este día: el desfile militar.
Como colofón final, el momento más esperado por los ciudadanos, el saludo desde el balcón de Palacio amenizado por las canciones populares tocadas por la banda justo debajo del lugar por donde se asoman.
Un año más, la familia Grimaldi no ha decepcionado en el que se ha convertido en uno de los días más esperados en el Principado.