Carlota Casiraghi ha regresado a París. Hace apenas cinco meses, la hija de la princesa Carolina se trasladaba a Roma para vivir con el director de cine Lamberto Sanfelice. Parecía el comienzo de una nueva vida en una nueva ciudad, pero a la vuelta del verano... ha hecho el mismo recorrido en sentido inverso: ha dejado Italia y ha vuelto, sobre sus pasos, sin razón aparente, a Francia. El motivo de esta segunda mudanza en menos de medio año es una causa mayor: su hijo. Cuenta la prensa italiana que Carlota quiere que su pequeño Raphaël, que comienza ahora la escuela, reciba su educación allí según lo acordado con su padre, Gad Elmaleh.