Primera fiesta de la boda italiana: Beatrice elige Alberta Ferretti y Carlota apuesta por Zara

Por hola.com

Una boda como no hemos visto otra. Las celebraciones para el enlace de Beatrice Borromeo y Pierre Casiraghi comenzaron el viernes 24 de julio en Mónaco y terminarán mañana 2 de agosto en el Lago Maggiore, Italia. Los novios e invitados han tenido cuatro días de descanso entre unas festividades y otras y, lógicamente, a tanta celebración se le unen otros cambios de ropa.

So beautiful #BeatriceBorromeo the day before her wedding in #AlbertaFerretti #isolabella

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La gran protagonista, Beatrice se ha esmerado al máximo. Para su boda en Mónaco confió en la Maison Valentino que adaptó a ella los diseños de Couture que más le agradaron. Como siempre en ella, su elección de hoy será italiana y mientras se espera que quede desvelado el vestido con el que dará el 'sí, quiero' religioso. Mientras tanto, anoche en la fiesta previa ofrecida en la Isla Madre, propiedad de su familia, apostó por un estilo etéreo, romántico y de princesa medieval diseñado por Alberta Ferretti. El diseño original era blanco si bien para Beatrice se ha adaptado al marfil, es de seda y delicadamente bordado con adornos florales. El vestido está a a la venta en el portal Netaporter por 4.455 euros. Los zapatos que llevó anoche fueron una sandalias completamente planas y sin adornos mientras que su pelo iba tocado con flores pero no en diadema sino en una ligera cascada en la parte de atrás.

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La exquisitez de Beatrice contrastaba con la naturalidad de su cuñada Carlota Casiraghi que eligió un vestido de la nueva colección de Zara para acudir a la primera fiesta de la boda religiosa de su hermano. El look boho triunfa entre el círculo de las Casiraghi y Carlota siguió la tendencia confiando en el máximo exponente español de moda internacional, Zara. El vestido está a la venta por 39,95 euros y seguro que se agota en días.

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Por cierto, Valentino volvió a triunfar ya que tanto Tatiana Santo Domingo (con vestido de estrellas) como Pauline Ducruet (con sandalias romanas y un vestido corto blanco) confiaron en la gran Maison italiana para esa primera noche de fiesta en el lago Maggiore.