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El 18 de enero de 2017, hace exactamente dos años, dos meses y 17 días, el Departamento de Prensa del Gran Ducado anunciaba de manera oficial la separación del príncipe Luis -tercer hijo de los Grandes Duques Enrique y María Teresa- y la princesa Tessy de Luxemburgo. Lo que no imaginaban entonces es que el proceso de divorcio se dilataría durante meses y meses, en los que las desavenencias, los desacuerdos y los recursos se han sucedido. Por fin, este jueves 4 de abril la pareja cerraba este capítulo al decretar oficialmente el cese de su divorcio.
Tal y como recoge ¡HELLO!, este jueves el juez MacDonald formalizaba el divorcio del extinto matrimonio, un paso que ha supuesto un alivio tanto para Luis como para Tessy de Luxemburgo. "Han sido los tres años más difíciles de mi vida en los que aprendí mucho sobre las personas y cómo son realmente. Mis hijos y yo estamos expectantes y entusiasmados ante nuestro futuro. Luis y yo nos unimos cuando se trata de los niños y seguimos siendo un equipo maravilloso", confesaba en conversación con Royal Central, al tiempo que ponía de manifiesto que será el próximo 1 de septiembre cuando deje de ser princesa.
Este trámite llega cinco meses después de que Tessy de Luxemburgo decidiera coger las riendas de su defensa y representarse a sí misma en el proceso de divorcio en lugar de optar por contratar los servicios de un gabinete de asesoramiento legal. La princesa, que hizo carrera en el ejército, pasaba a litigar ella misma en una batalla que ya venía durando mucho más de lo esperado. Ella misma decidió exponer ante el Tribunal Supremo de Justicia de Reino Unido todos y cada uno de los argumentos legales, en una declaración que se alargó una hora. En diciembre, el juez estimó, por un lado, que Luis de Luxemburgo debía abonar cerca de 9.000 euros anuales para la manutención de sus dos hijos, y por otro, que Tessy podía vivir con ellos en la propiedad del matrimonio.
Sin embargo, días después la que fuera nuera de los Grandes Duques mostró su desacuerdo con la sentencia y quiso matizarla. Aseguró que únicamente podía residir en dicha vivienda durante seis meses y no hasta que el menor tuviera 18 años, lo que traería consigo que tanto ella como los pequeños se quedarían sin hogar, algo que según ella no se había consignado correctamente en la mayoría de medios de comunicación. "Es un momento muy decepcionante y triste. Ninguna madre debería pasar por algo así", detalló a través de un comunicado.
El proceso de divorcio de Luis y Tessy ha sido tan inusual como lo fue su historia de amor. Ambos se conocieron en un curso de formación del Ejército en Luxemburgo y se dieron el 'sí, quiero' el 29 de septiembre de 2006 cuando solo tenían 19 y 21 años, respectivamente. A su enlace acudió el hijo mayor de ambos, Gabriel, que había nacido meses antes. Un año después llegaba al mundo Noé, el pequeño de la familia.
La separación de Luis y Tessy de Luxemburgo: de la conmoción al desconcierto
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