Mucho se ha hablado de la soledad que el príncipe Harry dice haber sentido a lo largo de su vida en el seno de la Familia Real británica y que ss escenificó este sábado durante la coronación de su padre, a la que acudió sin Meghan Markle y en la que fue relegado a la tercera fila. Sin embargo, en un futuro, su único hermano Guillermo, príncipe de Gales, también podría experimentar esa soledad en un ámbito no solo afectivo, sino también institucional ya que las relaciones con Harry están rotas. Esto podría explicar la presencia de la familia Middleton en la Abadía de Westminster en la coronación, que se ha convertido en la vida del heredero en algo más que sus parientes políticos.
A Michel y Carole Middleton, los padres de la princesa de Gales, sí se les esperaba casi con toda seguridad en el servicio religioso de coronación. Además de ser los padres de la princesa son los abuelos del príncipe George, que tuvo un papel destacado como paje del soberano y está llamado a ser Rey. Sin embargo, la presencia de los dos hermanos de la Princesa, Pippa y James, quienes acudieron sin sus cónyuges llamó la atención.
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Una verdadera familia para el heredero
Kate Middleton está muy unida a sus padres y a sus hermanos. La relación del clan es estupenda y Guillermo de Inglaterra ha encontrado en ellos a una verdadera familia y unos vínculos afectivos que no había conocido tras el tormentoso divorcio de sus padres, la muerte de su madre, la princesa Diana, y la ruptura con su hermano.
Desde que comenzó a salir con Kate en la universidad de St Andrews, el príncipe Guillermo fue acogido en la casa de sus suegros como uno más, haciendo una vida sencilla y disfrutando de comidas y ratos viendo la televisión, como cualquier familia. Unos planes que en su infancia y adolescencia poco pudo disfrutar ya que a sus padres los tenía casi siempre por separado. Esto caló en Guillermo y le ha hecho ser un padre presente en la educación de sus tres hijos. Su mudanza a Adelaide Cottage, una propiedad en Windsor más modesta que el Palacio de Kensington, sin espacio para que el personal pernocte ha hecho que el futuro heredero George no sea criado exclusivamente por niñeras.
La familia Middleton es discreta, pero siempre está visible en los momentos importantes. Kate eligió a su hermana como única dama de honor en su boda, dándole una notoriedad mundial, y juntos, como la piña que son, han acudido a actos importantes para la Princesa, como su concierto de villancicos, y también a bodas y funerales reales.
La importancia de los cuñados
En esta ocasión, la presencia de Pippa y James colocados en la bancada destinada para la Familia Real británica pone de relevancia hasta que punto los Middleton son importantes no solo para Kate, sino para Guillermo. Máxime cuando otros importantes invitados tuvieron que quedarse fuera por falta de espacio. Así, solo dos miembros de la familia de la abuela materna del monarca, sir Simon y Lady Bowes-Lyon, estuvieron en la Abadía igual que la condesa Mountbatten, la única representante de una dinastía muy unida a los Windsor.
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En un futuro, el príncipe Guillermo subirá al trono y sus apoyos oficiales no serán demasiados. A diferencia de su padre que siempre ha contado con los consejos y la presencia de sus hermanos, muy especialmente de la princesa Ana, el actual heredero no tiene a tantas personas que le puedan dar sostén en la parte más institucional.
Los reyes Carlos y Camilla cuentan y contarán con los príncipes de Gales. El monarca ha sido coronado a la edad en que otros jefes de Estado abdican así que es posible que en unos años ya no pueda hacer giras por el extranjero, igual que ocurrió con Isabel II y Felipe de Edimburgo. Será entonces el despegue internacional de Guillermo y Kate.
En el ámbito familiar, Michael y Carole Middleton han sido los abuelos más cercanos a George, Charlotte y Louis y lo serán muy especialmente a partir de ahora tras la subida al trono de Carlos, que ha aumentado sobremanera sus obligaciones institucionales.