Fue un niño esperadísimo. Su primera imagen se hizo de rogar y los medios lo bautizaron como 'baby Sussex'. Archie Harrison, como le llamaron, es el primer hijo del príncipe Harry y Meghan Markle y aunque, a diferencia de su hermana, él nació en Londres y tuvo una presentación oficial y un bautizo en Windsor, la retirada de sus padres de la primera línea de la realeza conllevó que al niño también le envolviera un halo de discreción. Tras su primera y última gira oficial por el sur de África, donde fueron con el pequeño, las imágenes de Archie caían con cuentagotas. Hasta ahora.
Los momentos más simpáticos de Archie
El hijo mayor de los duques de Sussex es uno de los protagonistas del primer episodio del documental de sus padres en Netflix. El capítulo es toda una ventana a su intimidad, esa que con tanto celo guardan. La diferencia es que ahora son ellos los que deciden cuando abrirla y cuando cerrarla. En las imágenes, vemos al niño cuando era un bebé, disfrutando del cariño de sus padres y también mirando fijamente una fotografía de su abuela Diana de Gales, mientras su madre le sostiene en brazos y le pregunta cariñosamente quién es. En ese momento aún es muy pequeño y cuando más sorprende es en las imágenes en las que se puede apreciar lo mucho que ha crecido cuando ya tiene tres años y medio.
"Ya está todo, muy bonito", sorprende escuchar esta frase en boca de Archie, extasiado ante una puesta de sol. No es la primera vez que se le oye su voz, ya que en Archewell Audio, el primer podcas de Meghan y Harry que lanzaron en 2020 ya se le puede oir de fondo diciendo alguna palabra. Sin embargo, ahora oímos a un niño mucho mayor con una voz infantil, pero seguramente cada vez menos "chillona" -así la describió Harry con un humor hace un tiempo- y sobre todo, como cabría esperar, con un ligero acento estadounidense.
Además, este primer episodio de la serie documental de Harry y Meghan muestra otra escena inédita: el primer cumpleaños de Archie, ya en Estados Unidos y junto a Doria Ragland, su abuela paterna. Los cuatro posan eufóricos, en familia y disfrutando de un día que nunca habían imaginado poder pasarlo así. En el siguiente capítulo, también muestran una peculiar estampa padre-hijo, en la que Harry le habla a su hijo mayor sobre los colibrís, mientras el niño parece más pendiente de sus pies, haciendo simpáticos comentarios a su madre. Una escena tan cotidiana, como bucólica en la que muestran no solo la normalidad de una familia, si no que también parecen querer transmitir ese entorno idealizado que es para ellos la nueva vida que han construido.
Para los duques de Sussex alejar a sus hijos del foco mediático siempre fue una prioridad. El príncipe Harry adopta su rictus más serio para hablar de esta cuestión: la protección a su familia, el detonante de la decisión que cambio radicalmente su vida. "Sabía que tenía que hacer lo imposible para proteger a mi familia, especialmente después de lo que pasó con mi madre", decía el hijo menor de Carlos III y Diana de Gales.
Escucha el primer episodio del podcast de ¡HOLA! 'Harry y Meghan: jaque a la Reina. Todos los episodios disponibles aquí.