Isabel II es mujer de tradiciones, pero este año, por culpa de la pandemia, se ha visto forzada a hacer algunos cambios. Por primera vez en más de tres décadas la soberana británica no pasará la Navidad en su finca de Sandringham, sino que permanecerá en Windsor, donde ha pasado gran parte del confinamiento y también se ha anunciado que el acto de entrega de aguinaldos a los trabajadores de la Casa Real también ha quedado suspendido. Toda precaución es poca para proteger a la longeva Reina, de 94 años, y a su marido, el duque de Edimburgo, que este verano se convertirá en centenario.
A pesar de ello, la soberana ha recuperado la sonrisa después de haber conseguido reunir a gan parte de su familia en su querido castillo de Windsor. El motivo no ha sido otro que que un sencillo acto por parte de la Familia Real para agradecer a los voluntarios locales y trabajadores esenciales sus esfuerzos este año. Además de la Reina estuvieron el príncipe de Gales, la duquesa de Cornualles, el príncipe Guillermo, su esposa, los condes de Wessex y la Princesa Real. Solo se echó en falta al duque de Edimburgo y a los duques de Sussex, que aunque son parientes muy cercanos a la monarca, llevan meses viviendo en Estados Unidos desde que decidieron dar un paso atrás en su vida como royals
A pesar de estar ocho miembros de los Windsor reunidos y sin mascarillas, todos guardaron la pertinente distancia de seguridad en este acto que se celebró al anochecer y al aire libre. Durante su aparición pudieron escuchar una selección de villancicos interpretados por The Salvation Army Band. Los Duques de Cambridge llegaron directamente tras su tour real en el tren real por Inglaterra, Escocia y Gales, donde han querido agradecer a los voluntarios y trabajadores que han estado en primera línea luchando contra la pandemia sus esfuerzos. En la Navidad más extraña para todos, también queda en el aire saber qué planes tendrán el príncipe Guillermo y su familia. Se baraja con la posibilidad de que pasen los últimos días del año en su casa de campo de Anmer Hall o con los padres de la Duquesa, Michael y Carole Middleton
La duquesa de Cambridge eligió para la cita un abrigo de Catherine Walker en color verde oscuro con cuello de piel sintética y lució unos pendientes de diamantes de la Reina, que ya le ha pedido prestados en otras ocasiones. Después, recibieron en unas capras a la veintena de asistentes a este acto. Entre ellos había un conductor de autobús, un barrendero y algunos directores de escuelas que fueron recibidos por los miembros de la realeza. En esta gira por su país, el príncipe Guillermo y Kate han dejado imágenes inolvidables. Así, se les vio tostando unos malvaviscos en su visita por el castillo de Cardiff. La pareja real se sinceró con un grupo de estudiantes sobre la incertidumbre que les ha generado el COVID-19. El hijo de la princesa Diana dijo que planear la Navidad este año está siendo 'muy difícil' y 'todavía estamos tratando de hacer planes. Es complicado saber qué hacer', manifestó
Vestida de rojo navideño, con un diseño de Angela Kelly que complementó con sombrero y broche de rubíes y diamantes, Isabel II no podía borrar la sonrisa de su cara. Hacía muchos meses, que no se reunía con su familia. En concreto, desde el pasado 9 de marzo cuando todos juntos acudieron a la Abadía de Westminster con motivo del Día de la Commonwealth. Un acto, de gran relevancia que fue el último compromiso público de los duques de Sussex como miembros de primer nivel de la monarquía británica. El pasado noviembre los Windsor también aparecieron en el Domingo del Recuerdo, para mostrar sus respeto a los caídos en actos de servicio, pero no todos estuvieron en el balcón
Ha sido un año también especialmente difícil para el príncipe Carlos y su esposa, la duquesa de Cornualles. El heredero al trono fue uno de los royals que se infectó de COVID-19, aunque su recuperación parace que ha sido total. Por su parte, la Duquesa ha visto como en los últimos tiempos ha sufrido un aluvión de ataques por la imagen que de ella se proyecta en la cuarta temporada de The Crown
Los condes de Wessex parecen haber tomado el relevo al príncipe Harry y Meghan dentro de los actos de la Corona. La Condesa he estado realizando un llamativo trabajo de voluntariado durante la pandemia, que ha hecho que los focos se fijen en ella. Está previsto que ellos también pasen las navidades separados del resto de miembros de la realeza inglesa para evitar posibles contagios
El príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles, que por edad también se encuentran dentro del grupo de riesgo por el coronavirus, ya han anunciado que pasarán la Navidad en Highgrove House, en Gloucestershire, en lugar de viajar hasta Windosr para estar con la Reina y con Felipe de Edimburgo. Aún así se espera que puedan en algún momento volver a coincidir con la monarca. Incluso entra dentro de lo probable que la Duquesa se reencuentre con sus hijos Tom y Laura y sus familias durante estos días