Para la ocasión, la duquesa de Cambridge se decantó por un vestido camisero midi de seda bicolor de Suzannah, al que ha incorporado numerosos complementos, como un cinturón de Alexander McQueen negro con original lazo frontal, un broche con forma de pajarita, un bolso mini de piel y mimbre también de Alexander McQueen, gafas de sol Ray Ban y unos salones de tacón ancho de Gianvito Rossi