Ajenos a las multitudes. Cientos de personas aguardaban en la Ópera de Sídney para dar la bienvenida al nieto de la Reina y a su mujer en su primer día en Australia. Muchas manos que estrechar, muchos ramos de flores y regalos a recoger y muchos objetivos que buscan la foto del día, sin embargo, entre la multitud, Harry busca la mirada de Meghan.