El aterrizaje, pasado por nieve, de los Duques de Cambridge en Oslo

El príncipe Guillermo y la Duquesa continúan con su gira por Escandinavia y este jueves han sido recibidos por Haakon y Mette Marit de Noruega a pie de una blanca pista. Los Duques de Cambridge comenzaban el martes su periplo por Suecia y Noruega y lo hacían en medio del frío, la nieve y el hielo, que les han ido acompañando a lo largo de todo su viaje oficial por el norte de Europa.

Pese al frío, las dos parejas han departido durante unos minutos al pie de las escaleras de acceso al avión, por donde han descendido los duques de Cambridge en la nevada pista de aterrizaje. Los dos matrimonios han combatido las bajas temperaturas con abrigos y bufandas.

Si el primer día conocieron tradiciones como el hockey sobre hielo y se reunieron con la Familia Real sueca, además de encontrarse con varios galardonados con los premios Nobel y acudir a una cena de gala, la segunda jornada estuvo protagonizada por los hijos de Victoria de Suecia, Estelle y Oscar, que 'invitaron' al príncipe Guillermo y a su esposa a tomar el té, entre otras actividades programadas en su agenda.

La nieve ha sido la gran protagonista de este tercer día de visita oficial del nieto de la reina Isabel II y su esposa, embarazada ya de siete meses. En la imagen, el heredero noruego saluda al duque de Cambridge y charla animadamente con él.

La Duquesa de Cambridge se encuentra ya en el tercer trimestre de embarazo, algo que se ha dejado entrever a lo largo de este viaje gracias a los estilismos que ha lucido. Para su tercera jornada, la esposa del príncipe Guillermo lució un abrigo azul de Catherine Walker que lució y que combinó con un vestido de la marca premamá Seraphine. 

Los Duques de Cambridge han aterrizado este jueves en Oslo, tal y como tenían previsto. Allí han sido recibidos por Haakon y Mette Marit de Noruega a pie de una blanca pista marcada por la nieve.

Con un paisaje completamente nevado, los miembros de la Familia Real noruega saludaban afectuosamente a los Duques de Cambridge, con los que intercambiaban impresiones y risas tras el ligeramente complicado aterrizaje por culpa de las condiciones meteorológicas

Muy sonrientes y cómplices, los Duques de Cambridge llegaban al aeropuerto de Gardermoen de Oslo, desde donde partirían, junto con Haakon y Mette Marit de Noruega, hasta el Palacio Real, lugar en el que se alojan en esta etapa de su visita oficial.

Allí tenían previsto almorzar junto con los anfitriones, los reyes Harald y Sonia de Noruega, así como con las princesas Marta Luisa y Astrid.

Al más puro estilo de 'Frozen', la Duquesa de Cambridge y Mette Marit de Noruega conversaron bajo la nieve en una estampa de lo más invernal.

Ambas mantienen una excelente relación que ha quedado patente en este encuentro a pie de pista al que seguía el almuerzo y, posteriormente, varios eventos de índole cultural. La jornada de este jueves terminará con una cena en el Palacio Real.

Los Duques de Cambridge llegaban, por tanto, procedentes de Estocolmo en esta suerte de gira que constituye su primera visita oficial a Noruega.

Haakon de Noruega, como buen anfitrión, estuvo muy atento con sus invitados y no dudó en proporcionarles cualquier información e indicación que necesitaran. Tal y como se puede ver en la imagen, el príncipe Guillermo escuchó atentamente las explicaciones del heredero noruego.

La jornada de este jueves nos ha dejado bonitas fotografías del encuentro entre los dos matrimonios. Mette Marit de Noruega, completamente recuperada de su 'síndrome de los cristales rotos' que le afectaba al oído y al equilibrio semanas atrás, ha ejercido de perfecta anfitriona con los Duques de Cambridge, que no han dudado en saludar alegremente desde su vehículo, una vez han abandonado la pista de aterrizaje.

Los Duques de Cambridge han superado el ecuador de su viaje oficial por parte de Escandinavia. Para este viernes, está previsto que visiten una escuela y a mediodía disfruten de un almuerzo privado en la residencia de Haakon y Mette Marit de Noruega.

Un evento organizado por la Federación Noruega de Esquí será el encargado de poner el punto final al periplo del príncipe Guillermo y su esposa por esta zona del norte de Europa, viaje al que no han podido sumarse sus hijos, los pequeños George y Charlotte debido a sus compromisos escolares.

Los Duques de Cambridge se han dejado acompañar por la princesa Ingrid Alexandra, que ha ejercido de guía ante la atenta mirada del pueblo noruego.

La Duquesa de Cambridge, ataviada con un sombrero de pelo y guantes para combatir el grío, ha recogido multitud de ramos de flores que le ofrecían los ciudadanos allí congregados para verla.