El príncipe Guillermo ha tomado una decisión que ha suscitado una considerable controversia. El heredero al trono británico ha contratado a la misma firma de abogados que representó a su madre, la princesa Diana, durante la disolución de su matrimonio con el actual rey Carlos III. Este proceso de divorcio, que culminó con una resolución formal en agosto de 1996, significo un importante cambio en la historia de la Familia Real británica, alterando para siempre su imagen. La decisión del príncipe de Gales ha reavivado el recuerdo de aquellos tiempos tras recurrir al conocido despacho de Mishcon de Reya.
El príncipe Guillermo ha decidido que a partir de ahora sea la firma Mishcon de Reya quienes actúen en su nombre y en el de su familia. Un movimiento con el que se distancia de lo que siempre había hecho su padre, que es acudir a Harbottle & Lewis, firma de confianza de la Familia Real que los ha asesorado por décadas en asuntos legales complejos. Según publican en el Daily Mail, el heredero al trono "quiere emprender su propio camino. No quería seguir recurriendo a los abogados de su padre. Así de simple. Quiere ser él mismo".
Un hecho que seguro ha llenado de felicidad y orgullo a Mishcon de Reya, especialmente a su vicepresidente, Anthony Julius, quien jugó un papel trascendental en la historia de la realeza: fue elegido personalmente por la princesa Diana para representarla durante su divorcio del entonces príncipe Carlos. Una decisión que fue un acto de confianza significativa, dado que el caso fue extremadamente mediático y complicado, involucrando no solo cuestiones legales, sino también un alto nivel de interés público.
En 1992, el matrimonio estaba irremediablemente roto y la separación de los príncipes de Gales se anunció en el Parlamento. ¡Aun así, "la Reina seguía esperando que hubiera algún tipo de reconciliación", contó Andrew Mortona HELLO! "Incluso invitó a Diana a un banquete de Estado... Y creo que eso fue, hasta cierto punto, un error, porque no hizo más que continuar la guerra de los Gales durante los años siguientes". Incluso después del divorcio, Isabel II seguía considerando a Diana como parte de la familia y estaba profundamente entristecida por su muerte.
Desde la revista HELLO!, informan que el despacho de Harbottle & Lewis estaría "decepcionado" por la decisión que ha llevado a cabo el príncipe de Gales. Y es que Gerrard Tyrrell, uno de sus socios y especialista en derecho de los medios de comunicación, es considerado uno de los asesores de mayor confianza del monarca. Entre los casos en los que los ha representado figuran el del escándalo de escuchas telefónicas de la realeza de News of the World en 2006, el cual concluyó con el cierre del diario. En aquel momento, los hijos de Carlos III fueron los blancos de la intervención de sus teléfonos móviles.