El lunes, Kate Middleton acompañó al príncipe Guillermo, a los reyes Carlos y Camilla y al resto de miembros de la Familia Real británica al Día de la Commonwealth, una de las grandes citas del año de la realeza inglesa. Una vez más, la princesa de Gales impactó con su abrigo rojo con maxi lazo, collar de Isabel II y pendientes de Diana de Gales. Es precisamente en estas joyas de su suegra donde se ha visto que faltaba un diamante.
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Los icónicos pendientes Collingwood de pequeños diamantes con una perla colgante en forma de lágrima fueron un regalo de la casa joyera favorita de los Spencer a la princesa Diana, en los meses previos a su boda, en 1981. Rápidamente, se convirtieron en unos de sus favoritos y los más icónicos, ya que los usó mucho, incluso cuando los combinó con su famoso ‘vestido de la venganza’ negro.
La madre de los príncipes Guillermo y Harry los estrenó antes de su enlace con el entonces príncipe Carlos en un banquete ofrecido en el hotel Claridge’s para el rey Khalid de Arabia Saudí. Diana fue vista luciéndolos por última vez en 1994, y 23 años después, su nuera los usó en un banquete de Estado. Desde entonces, Kate Middleton los ha llevado en múltiples ocasiones oficiales y, al igual que fueron para Diana, se han convertido en un básico en el guardarropa de Kate. Así, se los hemos visto en el Passchendaele en 2017, en el Festival del Recuerdo en 2017, en el aniversario de las bodas de platino de Isabel II en 2017, en una recepción diplomática en 2017, en una cena de gala en Suecia en 2018 y en una recepción al Cuerpo Diplomático en 2018.
Sin embargo, el paso del tiempo habría hecho mella en la alhaja y les faltaba un pequeño diamante de los cuatro que se encuentran rodeando la parte superior de la perla. Se desconoce cuando desapareció la gema, pero en 2019, cuando Kate los usó en el día de la Orden de la Jarretera en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor, el diamante ya no estaba.