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Guillermo de Inglaterra (42 años) y Kate Middleton (43) disfrutan actualmente en familia de unas minivacaciones en el Caribe con motivo del parón escolar de sus tres niños, los príncipes George (11), Charlotte (9) y Louis (6), un alto en el curso académico que se produce siempre en Reino Unido a mediados de febrero. Desde allí, al otro lado del charco, el heredero al trono y su esposa han pausado momentáneamente sus días de relax y desconexión para hacer un importante anuncio relacionado con su agenda institucional.
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La pareja 'royal' comunicaba que retomará sus compromisos oficiales antes del próximo 1 de marzo, cuando se desplazarán hasta la localidad galesa de Pontypridd (en el condado de Rhondda Cynon Taff). Allí, se reunirán con representantes de las comunidades afectadas por las graves inundaciones en la zona, que tuvieron lugar a finales del pasado noviembre y principios de diciembre causando víctimas mortales y considerables destrozos a causa de las fuertes borrascas bautizadas como Bert y Darragh.
El número uno en la línea de sucesión, acompañado de su esposa, visitará también algunos negocios de este área como el Fountain Café y el Meadow Street Community Garden, para poder conocer así de primera mano los estragos de este temporal que provocó entonces un auténtico caos en el suroeste de Reino de Unido. Por otro lado, aprovecharán su estancia allí para visitar la tradicional pastelería The Welsh Cake Shop, donde ayudarán a preparar unos postres típicos de Gales como es el pan dulce que se cocina en una plancha y suele estar relleno de frutas secas como grosellas.
Hace un lustro, en 2020, el ahora rey Carlos III hizo también hizo una visita oficial a Pontypridd por los mismos motivos relacionados con la meteorología adversa en este lugar de Gran Bretaña. Entonces, fue la tormenta Dennis la que azotó severamente el lugar y ello fue motivo de preocupación para la corona británica, que envió al entonces príncipe como su representante junto a su esposa Camilla.
Guillermo y Kate han estado de vacaciones con sus hijos durante esta última semana en la isla caribeña de Mustique (Antillas Menores), uno de sus destinos favoritos para relajarse desde antes incluso de su boda en 2011. Parte del atractivo para ellos son los altos niveles de privacidad de los que allí gozan, al encontrarse en una lujosa villa dentro de un área de exclusión donde solo los residentes y el personal de seguridad u otros empleados pueden acceder.
Muchas otras celebridades han quedado cautivadas por este idílico paraíso, entre ellos el propio soberano inglés o el príncipe Harry y Megan Markle. Más allá de la realeza británica, también se ha visto por este sitio a nombres tan conocidos como Brad Pitt, Tommy Hilfiger, Mick Jager, Carolina Herrera o Ana Boyer y Fernando Verdasco. La última que se ha dejado ver ha sido Sassa de Osma, la princesa de Hannover, donde a comienzos de 2025 pudo disfrutar de la paz y la naturaleza salvaje de este exclusivo enclave de apenas 5,7 kilómetros cuadrados, perteneciente a San Vicente y las Granadinas.