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El rey Carlos III siempre ha sido un firme defensor de las terapias naturales y de la medicina alternativa, hasta el punto de expresar su preocupación personal por las restricciones que la Unión Europea imponía sobre ellas, así que no ha perdido la oportunidad de aprovechar el largo viaje de regreso al Reino Unido desde la isla de Samoa, en donde ha cerrado su primer viaje oficial, para tomarse tres días de descanso en Bangalore, donde se encuentra un centro de medicina holística que combina naturopatía, homeopatía, yoga y medicina ayuverdica. Tanto el jefe del Estado británico como su mujer, la reina Camilla, han convertido este "santuario" en una parada habitual después de sus viajes a Oceanía.
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Un portavoz del Palacio de Buckingham ha confirmado a los medios británicos el paradero del rey, que regresará este jueves al Reino Unido. El soberano ha estado en esta finca orgánica al sur de la India que es hogar de varias especies de flora, fauna y otras aves exóticas. Una semana cuesta en torno a los 3.500 euros y está pensada para prevenir, tratar o mejorar el cuerpo y la mente con los programas de bienestar y promoción de la salud del doctor Isaac Mathai, que, según pública The Telegraph, ha sido el consultor de salud holística de Carlos III durante décadas y una vez le describió como el "menos exigentes" de sus invitados. El doctor Mathai aborda cuestiones relacionadas con el estilo de vida y también con enfermedades raras y complejas. "Estos programas se basan en un protocolo único que prescribe programas de tratamiento individualizados y medicamentos preparados a medida para cada persona por nuestro equipo médico", cuentan en su página web.
Teniendo en cuenta la controversia que ha generado en anteriores ocasiones la afición de Carlos III por las terapias alternativas, la prensa británica se ha apresurado a aclarar que este retiro no tienen anda que ver con el tratamiento contra el cáncer que está recibiendo el soberano e interrumpió durante su gira oficial, aunque sí está en sintonía con lo que acordó su equipo médico: la necesidad de incluir buenos períodos de descanso como parte de la planificación general de un viaje largo para priorizar la recuperación del jefe del Estado.
Que haya trascendido la reina Camilla había estado aquí en el año 2012 y 2022, cuando buscó refugio durante el mes de octubre, poco después de convertirse en la reina consorte del Reino Unido y haber vivido todo lo relativo a la muerte de Isabel II y la posterior proclamación de Carlos III. Hay que recordar que el matrimonio vivió unas jornadas verdaderamente extenuantes, a nivel físico y emocional, debido a la extensión con la que se habían organizado las despedidas de Isabel II y la máxima exposición que vivieron. Por otro lado, ya en el año 2013, Carlos III quiso mostrar su apoyo a través de un vídeo al centro Soukya, en el marco de un congreso internacional de salud que se celebró en la ciudad india. Eso sin olvidar que durante la pandemia recomendó a los británicos que practicaran yoga, una terapia accesible desde casa y que ayudaba a aquellos que habían contraído el virus, puesto que controla el estrés, desarrolla la resiliencia y promueve la curación.
Un día en el retiro de Carlos III
Se desconoce si el soberano tiene un programa hecho a su medida, pero en general el programa diario comienza con una sesión de yoga antes del desayuno para luego comenzar los tratamientos de bienestar y rejuvenecimiento antes de la comida. Por la tarde hay otra ronda de terapias que termina con una sesión de meditación antes de la cena. A las nueve de la noche se apagan las luces y el silencio debe ser total.
Este centro de salud holística internacional cuenta con 25 habitaciones de lujo, decoradas con un ligero toque colonial y construidas de forma sostenible, en las que se han quedado, entre otros, la actriz Emma Thompson o el difunto arzobispo Desmond Tutu. En cuanto al menú que ofrecen, hay que destacar que toda la comida es sátvica, es decir, hecha con aquellos alimentos que se consideran puros y equilibrados, como son las frutas, los vegetales, algunos frutos secos, algún tipo de cereal, la miel, algunas especias... Nutrientes que según la tradición ayurvédica, la medicina ancestral de la India, se asocian con la salud mental y el refuerzo del sistema inmune.