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La llegada del otoño para Kate Middleton ha supuesto un nuevo comienzo. La princesa de Gales anunció a principios de septiembre que había acabado su tratamiento de quimioterapia, la mejor de las noticias, aunque aún queda mucho camino por recorrer. Sin embargo, ya ha retomado su agenda, ha participado en actos oficiales y poco a poco va volviendo a la rutina y las actividades que el cáncer le arrebató. También en el ámbito familiar, los Gales vuelven a todas las aficiones que les gustaban hacer, como ir a ver a sus hijos en sus actividades extraescolares.
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El sábado, Kate Middleton acudió a animar a su hijo pequeño, el príncipe Louis, a uno de sus partidos de fútbol, junto con otros padres, con los que la Princesa charló animadamente mientras acompañaba a su benjamín a su cita deportiva. “Llevo a mi hijo a jugar al fútbol casi todos los fines de semana. Cuando llegué había mucha gente charlando y había un ambiente un poco raro”, dijo una de las usuarias. Sobre Kate, otro padre comentó que “parecía cómoda, no llevaba mucho maquillaje y obviamente intentaba pasar desapercibida con una gorra, pero todos sabíamos que era ella”, agregó en redes sociales y recoge Tatler.
Para esta cita familiar y deportiva de carácter privado, la princesa de Gales se puso ropa cómoda y abrigada: unos pantalones acampanados de color marrón chocolate, botas y una gorra de tweed de Really Wild Clothing. Para protegerse del frío llevó un chaquetón encerado de Barbour, otra de sus prendas favoritas.
Apasionados del deporte
La pasión por el deporte de los príncipes de Gales y sus hijos es de sobra conocida. Esta misma semana, Mike Tindall, primo del príncipe Guillermo, reveló que al príncipe George le encanta el fútbol, como a su padre, y su hermano pequeño, que es un gran hincha del Aston Villa, que a Kate le encanta correr y Guillermo es un consumado jugador de polo. Kate también suele animar a su marido en estos partidos. A padre e hijo se les ha visto en multitud de partidos de los conocidos como Los Villanos y en la Eurocopa que se disputó en Berlín y en la que la selección española ganó a la inglesa. Tanto el heredero al trono como su primogénito disfrutan y sufren en cada partido y dejan unas imágenes que hablan por sí solas.
Este año y a pesar de su enfermedad, la princesa Kate ha acudido a algunos actos institucionales como el desfile The Trooping the Colour, la final de tenis de Wimbledon y actos más privados como servicios religiosos en Balmoral, junto a todos los Windsor. Desde que acabó su tratamiento, ha estado en reuniones de trabajo con miembros de su equipo, ha preparado su tradicional y conocido concierto de villancicos de Navidad. También ha disfrutado en Londres de una función de ballet, además de reunirse con una adolescente con cáncer y visitar, junto a su marido, Southport, la localidad británica que fue escenario de un brutal ataque con un cuchillo en el que perdieron la vida tres menores y varias personas que resultaron heridas durante un evento de Taylor Swift.