Kate Middleton con su familia© @willwarr

Tanto Anmer Hall (residencia de los Gales) como Park House (casa natal de Diana) están en los terrenos reales de Sandringham

Los príncipes Guillermo y Kate crean su vida familiar en Norfolk, el lugar en el que Diana de Gales nació y fue feliz

George, Charlotte y Louis disfrutan de una infancia parecida a la que su abuela describió: 'Era un lugar paradisíaco para unos niños en edad de crecer'


7 de octubre de 2024 - 7:35 CEST

Todo, absolutamente todo, estaba medido y pensando en el último golpe de efecto de los príncipes de Gales: el vídeo de tres minutos en el que la propia Kate Middleton comunicó que se había recuperado de la enfermedad que la llevó a retirarse de la vida pública cuando comenzaba el 2024. Lejos del tropezón de la famosa foto retocada que les obligó a revelar el verdadero estado de salud de la princesa, los Gales apostaron por una producción en tonos calidos, profesional y estudiada. Un vídeo que quería pacerse a "los de antes", una cinta que evocaba las que rodaban las propias familias para recordar las tardes de verano. Guillermo y Kate, con sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, dedicándose de lleno a diversiones que podrían haber salido de las páginas de un libro de Enid Blyton. Los cinco frente a la aventura, los cinco junto al mar, los cinco se divierten... Los príncipes de Gales no solo recrean para sus hijos una infancia como la que narraba la célebre escritora británica en los años treinta, es que además están reproduciendo los años felices que tuvo Diana de Gales y perdió. Todo sucede en ese mismo lugar, los terrenos de Sandringham en el condado de Norfolk, Diana de Gales no consiguió que sus hijos tuvieran esa infancia, pero sí la están teniendo sus nietos.

Para ti que te gusta

Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte

Navega de forma ilimitada con nuestra oferta 80 aniversario

1 año por 49€ 9,80€

Este contenido es solo para suscriptores.

Celebramos nuestro 80 aniversario con un 80% de descuento.

Suscríbete 1 año por 49€ 9,80€

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

© princeandprincessofwales

De residencias oficiales los Windsor van sobrados y los Gales más todavía, ya que tras la muerte de Isabel II el príncipe Guillermo heredó el lucrativo ducado de Cornualles, la cartera de inversiones más interesante y rentable de la realeza británica. Desde que Guillermo y Kate se casaron en abril de 2011 la pareja ha pasado por distintas viviendas, desde un apartamento en los terrenos del Palacio de Kensington hasta Adelaide Cottage en los terrenos de Windsor para estar cerca de Isabel II en lo que fueron los últimos años de la soberana. Sin embargo, la residencia campestre de Anmer Hall siempre ha sido su lugar especial y el destino elegido para pasar temporadas. Así que, con la princesa de Gales retirada para someterse a un tratamiento contra el cáncer, la decisión fue clara: pasar mucho más tiempo en esta casa de estilo georgiano que fue un regalo personal que Isabel II hizo a su nieto con motivo de su boda con Kate Middleton. George, Charlotte y Louis de Gales, que durante el año van al colegio Lambrook, cerca del Castillo de Windsor, han podido disfrutar de un verano en plena naturaleza. 

Levantada en 1802 con dos plantas y una buhardilla, la pareja invirtió cuatro años y una fortuna en su rehabilitación pero en el año 2015 consiguieron mudarse allí, entonces los príncipes estaban centrados en su matrimonio, en la llegada de sus hijos y el príncipe trabaja de forma voluntaria como piloto de helicópteros de emergencia, es decir, no estaba volcado al completo en las labores institucionales, algo que cambió en el año 2017 coincidiendo con una importante caída en su popularidad, en parte por que los británicos no estaban de acuerdo (así lo reflejaban las encuestas de la época) con que el futuro heredero al trono estuviera tan alejado del día a día de la jefatura del Estado.

© Getty Images

Anmer Hall está dentro de los terrenos reales de Sandringham, donde también se encuentra la residencia en la que los Windsor pasan sus vacaciones de Navidad, en la zona de la costa del condado de Norfolk, famoso por sus acantilados y por sus playas vírgenes. En esos mismos terrenos se encontraba Park House, la casa en la que nació Diana de Gales el 1 de julio de 1961, por que los Spencer y los Windsor vivieron cerca durante generaciones, como la propia Diana se encargó de recordar tras su ruptura con Carlos de Inglaterra, los Spencer sí son cien por cien de la nobleza británica, un comentario con el que quiso recordar que la Casa Windsor deriva de la dinastía alemana de Sajonia-Coburgo y Gotha.

Park House, construida originalmente para alojar a los invitados o al personal de la cercana Sandringhan House, fue arrendada por la familia de Diana en tiempos del reinado de Jorge V, gracias a la amistad del abuelo materno de Diana con el segundo hijo del rey, el que terminaría siendo el rey Jorge VI tras la abdicación de su hermano mayor. Diana de Gales adoraba Park House y reveló que fue allí donde vivió los únicos momentos felices de una infancia que ella misma describió como "profundamente desdichada" por el complicado matrimonio que tuvieron sus padres. 

 'Era un lugar paradisíaco para unos niños en edad de crecer'

Diana de Gales
© Getty Images

"Park House era una casa con buen ambiente y gran personalidad", recordaba Diana. "En contraste con el sombrío esplendor de Althorp, Park House, aun contando con diez dormitorios, las dependencias para el personal, los amplios garajes, la piscina al aire libre, la pista de tenis y el campo de críquet -por no hablar de los seis empleados a tiempo completo, entre ellos un cocinero, un mayordomo y una institutriz, resultaba sumamente acogedora", cuenta el libro de Andrew Morton, lleno de minuciosos detalles que hicieron pensar que había sido escrito por Diana desde que se publicó en 1992 y se confirmó tras su muerte en 1997, convirtiéndose en un éxito de ventas y considera la obra que mejor puede reflejar el punto de vista de la madre de Guillermo y Harry. 

Diana de Gales describió una infancia muy parecida a la que viven su nietos en Norfolk

La princesa también recordaba con cariño cómo era su habitación en Park House, un dormitorio color crema desde el que se veía el campo, el ganado y los bosques: "Era un lugar paradisíaco para unos niños en edad de crecer. Daban de comer a las truchas del lago de Sandringham House, se deslizaban por las barandillas, llevaban a Jill, su springer spaniel, a dar largos paseos, jugaban al escondite en el jardín, escuchaban el silbido del viento entre los árboles y buscaban huevos de paloma. En verano, nadaban en la piscina exterior climatizada, buscaban ranas y tritones, hacían pícnics en la playa cercana a su cabaña privada en Brancaster y jugaban con su propia casa del árbol". Una descripción, la que Diana de Gales brindó a Andrew Morton, que se refleja en el vídeo que los príncipes de Gales rodaron. 

© Getty Images

Nadaban en la piscina, buscaban ranas, hacían pícnics en la playa y jugaban con su casa del árbol

Con respecto a la proximidad de sus vecinos reales, Diana de Gales los describió como parte de un "paisaje social" que era un reflejo del tipo de familias que tenían acceso a ese lugar y a esa vida privilegiada. La princesa Diana matizó que conocía a los Windsor desde siempre, pero que no podía decir que se visitaran de forma habitual, aunque sí recuerda que todos los veranos ella y sus hermanos eran invitados a Sandringham House para ver la película Chitty Chitty Bang Bang, que se estrenó en 1968 y que es una adaptación de otro célebre británico, Ian Fleming, creador de las noveles de James Bond. Con el tiempo y la decepción del final de su matrimonio, la princesa Diana dijo que adoraba Norfolk, pero detestaba Sandringham, igual que adoraba Escocia pero no disfrutaba en Balmoral; unas declaraciones que se hicieron en un momento en el que ella estaba muy herida por el modo en el que estaba siendo tratada tanto por el príncipe Carlos como por la institución. 

La infancia de la pequeña Lady Diana se desmoronó en dos fases 

Esa infancia feliz de Diana Spencer se desmoronó en dos fases: primero, cuando colapsó el matrimonio de sus padres; y después, cuando tuvieron que dejar esa casa para instalarse en Althorp, la residencia que venía unida al título de conde Spencer que heredó su padre tras el fallecimiento de su abuelo.  “El mayor trastorno fue cuando mamá decidió largarse de casa. Ese es el recuerdo más vívido que tenemos los cuatro. Todos tenemos nuestras propias interpretaciones de lo que debería haber pasado y de los que pasó”, contó Diana de Gales, recordando que ella tenía seis años y estaba de pie en la escalera de piedra viendo como su madre,  Frances Spencer, cruzaba la puerta de Park House para no volver. Los niños la visitaban algunos fines de semana y Diana de Gales recordaba como su madre lloraba en cada despedida. 

'Fue un golpe terrible dejar Norfolk, allí vivían todas las personas con las que me había criado'

Diana de Gales
© Getty Images

A esta compleja situación se sumó lo que Diana de Gales, con trece años, vivió como un momento devastador: mudarse a Althorp, en Northampton, en 1975 tras la muerte de su abuelo, el VII conde Spencer. “Fue un golpe terrible dejar Norfolk, por que allí vivían todas las personas con las que me había criado. Tuvimos que hacerlo por que murió el abuelo y la vida dio un giro de ciento ochenta grados. Mi madrastra, Raine, apareció en escena, supuestamente de incógnito, solía hacerse la encontradiza con nosotros”, contó en libro que se publicó tras su separación del príncipe Carlos, pero antes de firmar el divorcio en 1996.

© Getty Images

Park House, Sandringham, la casa en la que nació Diana de Gales

Tras la marcha de la familia de Diana, Park House vivió varias fases e indudablemente tomó más interés cuando Lady Di se convirtió en el prometida del príncipe Carlos, ya que todos querían ver el lugar en el que había nacido. Isabel II la cedió para labores benéficas y actualmente es un hotel adaptado para personas en situación de discapacidad y sus cuidadores.