El 9 de septiembre, Kate Middleton anunciaba que había finalizado su tratamiento de quimioterapia, se pronunciaba sobre cuáles serían sus próximos pasos y despejaba las dudas sobre su regreso a la vida pública: "Espero con ilusión volver al trabajo y participar en algunos compromisos públicos en los próximos meses, cuando pueda". Veintitrés días después de esas palabras, ha retomado su actividad institucional por sorpresa acudiendo con el príncipe Guillermo a un acto muy significativo celebrado en el castillo de Windsor.
Detrás de este acto se esconde una historia de superación y optimismo que ha conquistado a los príncipes de Gales. A través de la ONG London Air Ambulance Charity, Guillermo de Inglaterra conoció a Liz Hatton, una joven de 16 años que ha terminado recientemente su tratamiento por un tumor raro y agresivo que le diagnosticaron en enero. Consciente de su pasión por la fotografía, le propuso acudir a Windsor para inmortalizar una ceremonia de investidura. Además, extendió la invitación a su familia para interesarse por su día a día y su experiencia con el cáncer.
El heredero al trono quería conocer más de la situación personal de esta joven y, una vez finalizada la ceremonia, han tenido un encuentro privado al que se ha sumado por sorpresa Kate Middleton. Aunque está volcada en su recuperación, la princesa se ha querido unir a esta cita para hablar personalmente con Liz, que atraviesa una situación similar a la suya. También ha escuchado el testimonio de su madre y su padrastro, Vicky Robayna y Aaron, así como el de su hermano Mateo. No en vano, es consciente de que "el viaje del cáncer es complejo, aterrador e impredecible para todos, especialmente para aquellos que te rodean y te son más cercanos".
Además de que han navegado en los últimos meses "en aguas tormentosas y por un camino desconocido", Kate Middleton y Liz Hatton tienen en común su pasión por la fotografía. La joven, que vive en la ciudad de Harrogate, intenta participar en todas las iniciativas relacionadas con esta afición y este miércoles ha tenido la oportunidad de captar con su cámara a Mark Cavendish , Waynes Barnes y Alistair McCois en un marco tan privilegiado como el castillo de Windsor. Por su parte, la princesa de Gales se ha convertido en la fotógrafa 'oficial' de la familia, labor por la que ha sido premiada, y hemos visto crecer a sus tres hijos a través de sus instantáneas.
Esta vez ninguna de ellas ha retratado el encuentro que han tenido, pero hay una imagen que sin duda recordarán para siempre con cariño: la de ambas abrazadas, trasladándose mutuamente su apoyo, optimismo y energía mientras la familia las mira con emoción y admiración a partes iguales. "Ha sido un placer conocer a Liz en Windsor hoy. Una joven fotógrafa talentosa cuya creatividad y fortaleza nos han inspirado a ambos. Gracias por compartir tus fotos y tu historia con nosotros", han dicho los príncipes de Gales. La joven, por su parte, ha definido a Guillermo y Kate como "encantadores, auténticos y amables" y se ha mostrado encantada de haber tenido esta experiencia.