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Desde el Reino Unido insisten en la idea de que Harry y Meghan fuera de la monarquía británica no tienen presencia, sin embargo, el príncipe ha ido ganando algunas batallas y todo lo que le rodea genera mucha expectación. Los duques de Sussex quieren demostrar que pueden seguir haciendo giras “casi reales” sin pertenecer a la realeza y, después del experimento de Nigeria, donde hicieron una puesta en escena y un programa muy similiar al que se hace durante una visita de Estado, aterrizarán en Colombia como invitados de la vicepresidenta del país. Un viaje que, sin hacerse público el programa oficial, ya está resultando muy polémico. Por si fuera poco, en plena cuenta atrás, su jefe de gabinete se retira solo tres meses después de empezar a trabajar con ellos. Todas las claves de un viaje conflictivo antes de comenzar.
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Los motivos de este viaje a Colombia
A priori nada unía a los duques de Sussex con este destino: Colombia. Es decir, el príncipe Harry ni como royal ni en el desempeño de sus labores filantrópicas privadas o en el marco de los Juegos Invictus había tenído interés o presencia en este destino, siempre se había enfocado en países de la Commonwealth o en el continente africano para la protección de la vida salvaje. Sin embargo, fuera de la realeza británica, los Sussex tienen que expandir su mundo y esta oportunidad la aprovechó Francia Márquez, la primera mujer negra en ocupar la vicepresidencia y el ministerio de igualdad de Colombia, quien se encargó de comunicar de forma oficial que Harry y Meghan habían aceptado amablemente su invitación.
“Durante su estancia, el duque y la duquesa de Sussex me acompañarán en visitas en Bogotá y en la región Pacífica y la región Caribe, en Cartagena y Cali”, aclaró a través de un comunicado en la página web de la presidencia colombiana en el que se señalaba que el plan es que la pareja conozca a líderes de movimientos relacionados con la juventud y la mujer, aportando su visión como voces autorizadas para la creación de un entorno digital seguro, uno de los objetivos que persigue la Fundación Archewell en su cruzada para frenar el ciberacoso, la explotación en línea y las repercusiones de estas amenazas en la salud mental. “Estamos seguros de que su visita contribuirá a destacar, cada vez más, el papel de Colombia como un faro de cultura e innovación”, concluyó la vicepresidenta colombiana matizando que este viaje se enmarca en la celebración de la primera Conferencia Ministerial Mundial para la Eliminación de la Violencia Contra la Niñez, que también se llevará a cabo en noviembre en el país.
Las reacciones y todos los enfrentamientos
Hasta aquí la versión oficial y acto seguido comenzó la polémica: el viaje se produce justo después de que Harry, que mantiene una larga batalla judicial con el Gobierno británico a cuenta de su seguridad, dijera en la televisión de su país (en el documental Tabloids on Trial de la ITV) que el Reino Unido no es seguro para su familia. Así que la prensa británica se lanzó en masa a cuestionar la seguridad del país en general y calificarlo como uno de los destinos más peligrosos del mundo, un ataque al que reaccionó el propio Gustavo Petro, presidente de Colombia, que publicó en la red social X: “Los países peligrosos son los que emiten CO2, los países no peligrosos son los que absorben CO2”. Por otro lado, algunos medios británicos querían saber quién paga la seguridad de la pareja en el destino, una cuestión que de momento no tiene respuesta, pero que no parece asunto del Reino Unido y que es previsible que se gestione desde la misma institución que les extiende una invitación oficial.
La cosa no iba a quedar aquí y menos tratándose de Harry y Meghan, así que esta semana han surgido nuevas informaciones sobre los verdaderos motivos de este viaje. Daily Mail (en una información que también recoge The Telegraph) publica que los Sussex podrían estar siendo utilizados como "peones políticos" para desviar la atención de los asuntos nacionales del país y mostrar un “escaparate” en el extranjero. “Estoy seguro de que ellos tienen buenas intenciones, pero aquí todos hablan de que obviamente están siendo manipulados”, afirma un abogado de Bogotá al citado medio británico. Al margen de análisis políticos, un terreno prohibido para la realeza y que vuelve a poner de manifiesto la complejidad del papel de Harry, que ya no pertenece a la institución pero sigue siendo el hijo del rey, hay una lectura que se extiende por los medios colombianos que es tan evidente como lícita: se espera que la presencia de los Sussex en el país atraiga la atención de organizaciones locales y globales.
La confusión que genera la ausencia de una agenda oficial
Bogotá, Cartagena, Cali... Estos son los lugares en los que se espera la presencia de los duques de Sussex, sin embargo, todo lo demás es un enigma porque ni en la página de la presidencia de Colombia ni en la web oficial de la fundación Archewell figura un programa oficial o una agenda. Este secretismo puede venir motivado por cuestiones de seguridad, de momento, lo único que se sabe es que comienza a finales de esta semana. Habrá que esperar para ver cómo Harry y Meghan han organizado la cobertura que se hará de este viaje, teniendo en cuenta de que a Nigeria viajaron con un equipo de prensa seleccionado por ellos. Hay que recordar que precisamente este tema, el de poder elegir las personas y los medios con los que viajaban, fue una de las peticiones que hicieron en el año 2020 cuando negociaron con Isabel II el seguir trabajando para ella pero bajo sus propias condiciones, algo que la soberana británica les dijo que no sería posible.
Su jefe de gabinete deja su puesto después de tres meses
En las últimas horas Daily Mail ha hecho público que Josh Kettler, el que fuera nombrado como el hombre perfecto para guiar a Harry a través de su siguiente etapa fuera de la realeza de la británica, ha dejado su puesto solo tres meses después de empezar. El citado medio contaba que esta retirada del jefe de gabinete levantaba muchas incógnitas por el momento en el que sucede, justo antes de este viaje a Colombia. Hay que recordar que Kettler, que también reside en Santa Bárbara, California, y fue el jefe de personal y responsable de asociaciones estratégicas en la plataforma de comunicación y realidad asistida Cognixion, se incorporó al equipo de los Sussex justo antes del viaje a Nigeria y también acompañó a Harry en su último viaje a Londres con motivo del décimo aniversario de los Juegos Invictus. Tras darse a conocer la noticia en el Reino Unido, el medio estadounidense People, se ha apresurado a aclarar que Josh Kettler estaba todavía contratado a modo de prueba. "La decisión de separarse fue mutua y ambas partes coinciden en que no era la opción adecuada", cuenta el citado medio.
Esta no es la primera vez que miembros de alto rango del personal renuncian a sus funciones con el duque y la duquesa. En 2023, Archewell se despidió del productor Ben Browning y de Fara Taylor, quienes dirigieron el marketing de su serie documental de Netflix y del podcast de Meghan en Spotify. Mientras tanto, en enero de este año, la pareja se despidió de Bennett Levine, el gerente de Archewell Production. Bennett fue recibido originalmente en el equipo como coordinador de la empresa en 2021. Luego fue ascendido a gerente de Archewell en 2022.