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Cada 25 de junio se celebra el Día Internacional de la Escoliosis. Enfermedad que sufre la princesa Eugenia de York. Para tratar este padecimiento la nieta de Isabel II fue operada siendo tan solo una niña. Una intervención quirúrgica que le dejó una evidente cicatriz en la espalda que no duda en mostrar con orgullo gracias al aliento y los consejos de su madre, Sarah Ferguson. “Le agradezco a mi madre la confianza que me ha transmitido. Ella eliminó todo el estigma alrededor de tener escoliosis y me quitó el miedo y la ansiedad a ser diferente. Le estoy eternamente agradecida”.
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Unas palabras repletas de cariño que la segunda hija del príncipe Andrés ha acompañado de una tierna fotografía de su infancia en la que aparece saliendo de un coche acompañada de su progenitora. De la misma manera, en sus perfiles públicos ha compartido otra imagen de su boda el 12 de octubre de 2018. Para aquel gran día, la princesa Eugenia optó por un vestido de espalda escotada, sin velo y con el pelo recogido que invitaba a recorrer con la mirada esta marca de su piel.
La escoliosis (una desviación lateral de la columna vertebral) llegó a la vida de la princesa Eugenia cuando esta tenía doce años. En varias ocasiones ha relatado lo asustada que se encontraba ante una operación de tanta magnitud. Por fortuna, su paso por quirófano, que duró ocho horas, fue todo un éxito. Desde entonces, se ha volcado con las iniciativas que se desarrollan en el Royal National Orthopaedic Hospital, centro médico donde fue intervenida, para dar visibilidad a este tipo de problemas.
La prima del príncipe Guillermo, que actualmente vive a caballo entre Reino Unido y Portugal por los negocios de su marido, está implicada en otras causas sociales como la Fundación Blue Marine, que se dedica a la conservación de los océanos, de la que es embajadora.
Sarah Ferguson y sus hijas, un equipo inseparable
Los últimos meses han sido especialmente delicados para Sarah Ferguson, que en el mes de enero anunció públicamente que le habían diagnosticado un melanoma maligno después de haberse sometido a una mastectomía en junio de 2023. Afortunadamente, la exmujer del príncipe Andrés está teniendo un buen proceso de recuperación. Durante su enfermedad, sus hijas, las princesas Beatriz y Eugenia, han sido un pilar fundamental. “Tengo una familia de lo más excepcional”, confesó en una reciente entrevista con la revista británica HELLO!
De la misma manera, ha encontrado refugio en el amor que le han brindado sus nietos: Wolfie (8), el hijastro de la princesa Beatriz nacido de una anterior relación de Edoardo Mapelli Mozzi con Dara Huang; Sienna (2); August (3) y Ernest (1), los niños de la princesa Eugenia y Jack Brooskbank.