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El príncipe Harry y Meghan Markle continúan con su gira por Nigeria para conocer a fondo la cultura tradicional del país y acercarse a algunas de las causas benéficas en las que están volcados. Es su primer desplazamiento juntos por la nación africana, un viaje que recuerda mucho al tour que hicieron en 2019 por Sudáfrica y en el que los acompañó su hijo Archie cuando era tan solo un bebé. Esta vez lo han hecho en solitario, derrochando cercanía y simpatía con la población local, que se ha volcado con su visita y los recibía como auténticas estrellas.
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Tras recorrer un colegio y reunirse con el jefe del Estado Mayor de la Defensa nigeriano, este sábado la pareja ha asistido a un partido de voleibol en el que todos los jugadores eran militares heridos, a excepción del príncipe Harry que se unió al juego y compitió sentado al igual que el resto de participantes.
Para la ocasión, Meghan Markle lució un vestido de Joanna Ortiz estampado con hojas de palmera en blanco y negro, y unas sandalias de color negro para combatir el calor y la humedad tan presentes en el país. El duque de Sussex llevaba pantalones oscuros y un polo con la insignia de la Fundación de los Juegos Invictus, el proyecto más personal del hijo de Carlos de Inglaterra que creó para que los soldados heridos en misiones pudieran competir deportivamente a pesar de sus heridas tanto físicas como mentales.
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Un encuentro de lo más disputado en el que finalmente el equipo de Harry, el Nigeria Unconquered, perdió frente al equipo del Jefe de Estado Mayor de Defensa. Nigeria Unconquered es la organización benéfica que trabaja estrechamente con la Fundación de los Juegos Invictus, la entidad que usa los deportes para inspirar la recuperación, promover la rehabilitación y generar una mayor conciencia, comprensión y respeto por los hombres y mujeres militares nigerianos heridos.
Durante el partido, una niña de seis años llamada Royalty Ojeh fue la elegida para entregarle un ramo de rosas rojas a Meghan Markle, que nada más recibirlo sacó una flor para entregársela a la pequeña, quien la miraba asombrada. El recibimiento a los duques de Sussex en el país ha sido extraordinario, con carteles que decían "43% nigerianos", ya que la nuera de Carlos III tiene un 43% de raíces nigerianas, según reveló ella misma en su podcast después de realizarse una prueba genética.
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"Meghan es una de los nuestros", podía leerse escrito en una bandera nigeriana que portaban tres mujeres. "Siempre la hemos amado, desde que la vimos en Suits, y estamos muy felices de que haya vuelto a casa a visitarnos", comentaban algunos de los asistentes al encuentro, mientras que otros le decían en broma al duque de Sussex que "nos debes una dote, Harry".
Posteriormente, los Duques han acudido a un gran almuerzo celebrado en el Cuartel General de la Defensa, en Abuya, donde hemos visto cómo se han cambiado de ropa para la ocasión. Con el color blanco como protagonista en ambos looks de etiqueta, Meghan Markle lucía un bonito vestido ajustado y con los hombros al aire, mientras su marido llevaba traje de chaqueta y una corbata azul.
El multitudinario encuentro ha sido de lo más animado, con participación de artistas de la región que han ofrecido una actuación de música y baile típicos del folclore del país, bajo la atenta mirada de los invitados 'royals' mientras estos ocupapan ya su sitio en la mesa. También los han agasajado con regalos, entre ellos un gorro de la vestimenta clásica de la zona. A continuación, micrófono en mano, el príncipe Harry ha ofrecido por último un emotivo discurso para trasladarles su felicidad y agradecimiento.
Está previsto también que Meghan participe como coanfitriona en un evento sobre el liderazgo femenino junto a la Dra. Ngozi Okonjo-Iweala, directora general de la Organización Mundial del Comercio, la primera mujer que asume este puesto y que antes fue ministra de Finanzas de Nigeria y directora gerente del Banco Mundial. El empoderamiento de las mujeres y la defensa de la igualdad de oportunidades es una de las líneas principales de la hoja de ruta de Meghan Markle, desde que esta abandonó sus deberes como miembro de la realeza británica.
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El domingo será el último día de este periplo africano en el que el príncipe Harry y Meghan Markle participarán en un acto de baloncesto de los Gigantes de África, al que le seguirá una recepción cultural y un evento de polo con el que se recaudarán fondos, precisamente para Nigeria Unconquered.
El viernes, unas horas después de que aterrizaran de madrugada en Abuya, los Sussex tuvieron una tradicional bienvenida, donde fueron agasajados con collares típicos y danzas locales. Más tarde, estuvieron en el cuartel general de la Defensa, donde Meghan llevó un impoluto traje blanco. La Defensa nigeriana está especialmente sensibilizada con la perspectiva que da el príncipe Harry a los efectivos heridos en actos de servicio y es el organismo que está ejerciendo de anfitrión en esta visita.
Este viaje de los Sussex se ha producido dos días después de que el miércoles, el príncipe Harry acudiera en Londres al décimo aniversario de los Juegos Invictus, donde solo estuvo acompañado por su familia materna, los Spencer, mientras la Familia Real británica participaba en una fiesta de jardín, a escasos tres kilómetros, presidida por los reyes Carlos y Camilla. El viernes, Harry se reencontró con Meghan en la sala VIP Windsor del aeropuerto de Heathrow, de la capital británica, donde la Duquesa hizo escala en su vuelo procedente de Los Ángeles (California).
Además del fomento de los Juegos Invictus, esta aparición de Harry y Meghan por Nigeria es de lo más importante para ellos. Los dos tienen fuertes lazos con el país. El año pasado, la Duquesa animó al equipo nacional en las competiciones de los Invictus que incluso le dio su propio nombre en el idioma de la zona: Amira (princesa guerrera) Ngozi (bendecida) Lolo (esposa real). En 2022, como señalábamos anteriormente, Meghan reveló en su podccast sus raíces nigerianas.
Para el hijo menor del rey Carlos, este país africano es significativo, pues desde hace dos años se unió a la Comunidad de Naciones Invictus y se convirtió en la primera región del continente en unirse al movimiento Invictus. En el año 1990 la princesa Diana visitó un hospital en Nigeria y si hubo una imagen que dio la vuelta al mundo fue la de la madre del príncipe Harry dándole la mano con mucho cariño a un enfermo de lepra.
Haz click para ver el documental “Harry y Meghan, terremoto en la casa Windsor” en el que se analizan cómo ha sido la vida del príncipe Harry y su esposa Meghan Markle desde que en enero de 2020 decidieron dar un paso atrás como miembros “senior” de la Casa Real británica. Aunque querían alejarse del foco mediático, en marzo de 2021 concedieron una entrevista a Oprah que dió la vuelta al mundo. ¿A qué se dedican ahora los duques de Sussex? ¿Cómo consiguen mantener su alto nivel de vida? ¿Cuáles son sus próximos proyectos? ¡No te lo pierdas!