Se abre otro capítulo en el enfrentamiento legal que mantiene el príncipe Harry con los tabloides británicos, con novedades agridulces para el hijo menor del rey Carlos III que se han conocido este jueves a través de un fallo del juez Timothy Fancourt, del Tribunal Superior. Por un lado puede seguir adelante reclamando justicia por la forma de conseguir información de News Group Newspapers (NGN), pero a la vez el magistrado ha desestimado los casos de piratería telefónica que el quinto en la línea de sucesión al trono británico reclama al editor del diario The Sun.
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El juez ha descartado seguir adelante con el asunto de las escuchas ilegales al considerar que el duque de Sussex no puede fundamentar por qué esperó hasta 2018 para interponer la demanda cuando la actividad que denuncia empezó en los años 90. En este sentido sostiene que que es inverosímil el argumento del hijo del monarca, quien sostiene que había un acuerdo secreto entre el grupo editorial y la Casa Real para que se diera prioridad a otras querellas presentadas por el resto de ciudadanos no pertenecientes a la realeza.
Harry de Inglaterra sí tiene luz verde para seguir reclamando justicia por otra parte de su demanda, concretamente la que alega que los medios que forman parte del citado conglomerado consiguieron "información confidencial de terceros" mediante actividades ilícitas. Apunta incluso a la posible contratación de detectives privados. Se espera que esta causa lleve al banquillo del Tribunal Superior de Londres al hijo menor del monarca y la recordada Diana de Gales el próximo año, cuando comenzarán previsiblemente las sesiones del juicio.
Este enfrentamiento legal se desarrolla a la vez que otra batalla emprendida por el Príncipe contra la prensa, concretamente contra el grupo editorial Mirror Group Newspapers (MGN), al que acusa de destruir diferentes etapas de su vida y sus relaciones. En su comparecencia, a comienzos de junio, tuvo un gran protagonismo Chelsy Davy, su exnovia. Y es que relató que las informaciones publicadas durante la relación le hacían sentir como si ese romance estuviera condenado al fracaso y esa situación condujo a la ruptura. "¿Cuánta sangre más manchará sus dedos tecleadores antes de que alguien pueda poner fin a esta locura? Algunos de los editores y periodistas son responsables de causar mucho dolor, malestar y, en algunos casos, quizás sin darse cuenta, la muerte", se preguntaba.
Cambio de domicilio
En 2020, los duques de Sussex dieron un paso atrás en sus obligaciones oficiales y fijaron su residencia en Estados Unidos. Una situación que ha provocado un alejamiento (no solo físico) entre el príncipe Harry y la Familia Real, a la que vio por última vez durante su presencia fugaz en la coronación de Carlos III en mayo. Centrado en tomar sus propias decisiones profesionales y personales, junto a su esposa, podría iniciar una nueva etapa más cerca de Hollywood. Se encontrarían en las primeras fases para adquirir una nueva mega casa en Malibú, a menos de cuarenta minutos en coche de la meca del cine.
Haz click para ver el documental “Harry y Meghan, terremoto en la casa Windsor”. En enero de 2020 el príncipe Harry y su esposa, Meghan, deciden dar un paso atrás como miembros “senior” de la Casa Real británica y tras vivir unos meses en Canadá se mudan a Los Ángeles, donde residen en una gran mansión junto a sus hijos. Aunque querían alejarse del foco mediático, en marzo de 2021 concedieron una entrevista a Oprah que dió la vuelta al mundo. ¿A qué se dedican ahora los duques de Sussex? ¿Cómo consiguen mantener su alto nivel de vida? ¿Cuáles son sus próximos proyectos? ¡No te lo pierdas!